Antonio Caló, secreario general de la CGT oficialista, ratificó su apoyo al paro de la UOM en Córdoba, pero despegó al Gobierno.
La seccional de Córdoba de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) lleva adelante hoy un paro de actividades con movilización por la zona céntrica de la capital cordobesa en rechazo a despidos y suspensiones en establecimientos metalúrgicos de la provincia.
Antonio Caló, líder de la UOM a nivel nacional y secretario general de la CGT oficialista, justificó la medida de fuerza. "Lamentablemente los compañeros de Córdoba tuvieron que tomar una medida que los dirigentes sindicales nunca queremos tomar", dijo.
En diálogo con radio Mitre , Caló dijo: "En estos diez años todos ganaron plata, así que en estos momentos tienen que conservar los puestos de trabajo".
Además, el metalúrgico despegó al Gobierno. "¿Qué culpa tiene el Gobierno en esto? No busco culpables, busco soluciones. Acá no se puede echarle la culpa al Gobierno", sostuvo.
El gremio en Córdoba estaba en "alerta y movilización" y venía amenazando desde abril con la aplicación de medidas de fuerza en contra de los "despidos hormiga" en fábricas y talleres.
Las suspensiones fueron más notorias en las autopartistas, cuya producción se ve afectada por las transitorias paralizaciones de la producción de automotrices como Renault, Fiat e Iveco.
Rubén Urbano, secretario general de la UOM Córdoba, reconoció que la crisis que afecta a la industria metalúrgica, pero señaló que su gremio no puede permanecer de brazos cruzados ante la amenaza sobre la fuente de trabajo de sus afiliados.
"Tenemos que utilizar la herramienta legal de la huelga para decirles basta a los despidos que vienen haciendo muchas empresas", explicó.