El dólar para la venta en el mercado negro se abarató otro 1,6% ayer (cayó 15 centavos) al cabo de una nueva jornada de operaciones acotadas por temor a inspecciones de la AFIP y llegó a tocar al mediodía un piso de $ 8,87 antes de rebotar y cerrar a un promedio de $ 9,05.

Alcanzó, de esta manera, su menor valor en 15 días y amplió al 13,4% su reacomodamiento bajista desde el máximo de $ 10,45 que ensayó el día después de que el Gobierno anunció un blanqueo admitiendo en los hechos el daño que la amplia brecha abierta entre el tipo de cambio informal y el formal (que por entonces llegó a superar el 100%) estaba causando a la economía.

Esa diferencia quedó reducida ahora a poco más de 72%, aunque aún más que duplica el nivel promedio del 30% que los analistas consideran relativamente inocuo para la actividad general.

No casualmente el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, les pidió la semana pasada a banqueros y cambistas colaboración para "arrearlo" hacia la zona de $ 6,50 una vez que la propuesta oficial para blanquear divisas no declaradas tenga fuerza de ley, algo que sus interlocutores coincidieron en advertirle que sería "inviable" a menos que la medida fuera acompañada con algún tipo de incentivo para que quienes tengan ahorros en pesos encuentren atractivo mantenerlos en esa moneda.

Por lo pronto, el rebote que mostró el billete tras el mediodía no sorprendió a quienes siguen las tendencias del mercado, básicamente porque una reacción igual había ya insinuado en la jornada previa la demanda de activos financieros locales cuando el tipo de cambio que surge de arbitrar monedas mediante ellos mostró resistencias a ubicarse debajo de los $ 8,50, pese a que las sostenidas ofertas de venta con precios a la baja que se habrían hecho por cuenta y orden de la Anses intentaron hacerlo bajar algún escalón más.

Esa situación se repitió ayer cuando la Bolsa y los bonos en dólares ensayaron otra apertura bajista, siguiendo la tendencia del "contado con liquidación", pero rebotaron con fuerza cuando éste comenzó a recomponerse al punto de dejar mejoras del 6% promedio en acciones y de una proporción similar entre los títulos en divisas.

No casualmente el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, les pidió la semana pasada a banqueros y cambistas colaboración para "arrearlo" hacia la zona de $ 6,50 una vez que la propuesta oficial para blanquear divisas no declaradas tenga fuerza de ley, algo que sus interlocutores coincidieron en advertirle que sería "inviable" a menos que la medida fuera acompañada con algún tipo de incentivo para que quienes tengan ahorros en pesos encuentren atractivo mantenerlos en esa moneda.

Por lo pronto, el rebote que mostró el billete tras el mediodía no sorprendió a quienes siguen las tendencias del mercado, básicamente porque una reacción igual había ya insinuado en la jornada previa la demanda de activos financieros locales cuando el tipo de cambio que surge de arbitrar monedas mediante ellos mostró resistencias a ubicarse debajo de los $ 8,50, pese a que las sostenidas ofertas de venta con precios a la baja que se habrían hecho por cuenta y orden de la Anses intentaron hacerlo bajar algún escalón más.

Esa situación se repitió ayer cuando la Bolsa y los bonos en dólares ensayaron otra apertura bajista, siguiendo la tendencia del "contado con liquidación", pero rebotaron con fuerza cuando éste comenzó a recomponerse al punto de dejar mejoras del 6% promedio en acciones y de una proporción similar entre los títulos en divisas.