Durante el corriente año, las exportaciones de granos y derivados alcanzarán a 30.504 millones de dólares, sólo 711 millones de dólares más 
que en 2013. De este modo, el agro “va a mantener el flujo 
de ­dólares, pero no va a pro­ducir un nuevo gran aporte 
de divisas en el 2014”, de acuerdo con un análisis difundido por Néstor Roulet, expresidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez).

Si bien consideró que habrá este año buenos ingresos 
de divisas por parte de la ex­portación del complejo sojero, el problema –advirtió– surge de analizar el total del sector agrícola, contemplando las exportaciones de los seis principales cultivos del país. La diferencia de ingreso final 
de dólares en el presente 
año, comparado con el 2013, no es significativo, concluye el trabajo.

Retroceso del maíz

La merma de ingreso de dólares más importante es por las exportaciones de maíz, ya que no sólo habrá un menor volumen (en 2013 se exportaron 20 millones de toneladas, contra 16 millones probables este año), sino también un menor valor de la tonelada exportada: de un promedio de venta de 287 dólares el año pasado, se pasaría a un valor aproximado de 217 dólares.

El aporte al fisco de las retenciones por los diferentes rubros agrícolas y sus deri­vados alcanzará, según Roulet, a los 9.351 millones 
de dólares.

“Se va a mantener el flujo de agrodólares en 2014. El campo va a repetir un buen aporte a la economía, pero no va producir un nuevo gran aporte de dólares”, advirtió quien hoy es asesor parlamentario del PRO en asuntos agropecuarios.

Superávit, complicado

A modo de conclusión, considera que esto prende una luz roja, ya que de aumentarse –como estiman algunas consultoras– el 3,1 por ciento las necesidades de divisas para la importación, y al mantenerse el aporte de dólares por parte del sector agroindustrial, los demás sectores aportarán igual o menos dólares. Con lo cual, “se abre un nuevo interrogante con el superávit de la balanza comercial”.

Avance de la cosecha

El último informe de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario, señala que el clima seco imperante permitió avanzar con la cosecha de soja y recoger poco más de la mitad del área cultivada, obteniéndose un promedio de 3.400 kilos por hectárea y picos de 4.400 kilos.

La amenaza de un nuevo período de lluvias para la próxima semana mantendrá la trilla a plena actividad durante el prolongado fin de semana, añadió.

Según el informe, hasta el momento se logró recolectar un 53 por ciento de la soja implantada de manera temprana, obteniéndose rendimientos que van desde un piso de 2.710 kilos hasta un máximo de 4.390 kilos por hectárea.

Por La Voz del Interior