Asegura que la inflación y la inseguridad son los principales problemas. Denuncia discriminación de la Nación a la Provincia
¿Que análisis hace de las medidas que instrumentó el Gobierno nacional para intentar contener la inflación?
–Estoy en contra de las medidas de ajuste. Humildemente he propuesto un acuerdo social por 18 meses, una vez terminadas las discusiones de paritarias, para que una vez que los salarios recuperen el poder adquisitivo, establezcamos una tregua de precios y salarios hasta el final del mandato de este gobierno. Se debe dejar de emitir como se está haciendo y resolver el problema de financiamiento de las provincias. Porque inflación y provincias desfinanciadas equivalen a conflicto social. Hay que rebajar el Impuesto a las Ganancias, que se come los aumentos salariales. La Presidenta debe terminar su gestión en la mejor condición, porque eso significa que el próximo gobierno va a arrancar desde la planta baja, no desde el subsuelo.
–¿Cree que existe riesgo de una conflictividad social aun mayor?
–Si la inflación no cesa y la inseguridad no merma, los conflictos sociales se van a incrementar. Hay un paro anunciado de dos centrales obreras. En la medida en que no haya diálogo, estamos frente a un caldo de cultivo del conflicto social. Hay que encontrar un camino de acuerdo, porque la situación es grave. Dicho en criollo: los argentinos estamos jodidos. Y no tendríamos por quéstarlo. Hay tomas de tierras, reclamos sociales. No podemos pensar que todo es complot. Puede haber mala política de por medio, porque algunos no buscan soluciones sino problemas, porque creen que pueden sacar algún rédito. Pero también es cierto que para que estos conflictos se produzcan debe haber caldo de cultivo. La inseguridad y la inflación son dos flagelos que hay que afrontar. También el narcotráfico, en el que la lucha la debe encabezar el Gobierno nacional. Desde las provincias, es poco lo que podemos hacer en ese sentido.
Juego local
Cada vez que De la Sota levanta el perfil en el debate nacional, se agita la discusión del PJ cordobés sobre el escenario futuro después de que concluya su actual gestión.
“En 2015, me veo entregando el poder en la provincia a otro gobernador”, advierte.
En los últimos días, las especulaciones incluyeron la posibilidad de que se postule para un nuevo mandato en la gobernación, una variante que está admitida por la Constitución de la Provincia de Córdoba.