El temblor se sintió en las zonas afectadas por el terremoto de 8,2 del martes pasado. No se registraron heridos ni daños. Cesó el alerta de tsunami.
Según el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, el movimiento telúrico se registró a las 22.37 hora local del jueves y su epicentro se situó a 63 kilómetros al suroeste de Iquique y 31,8 kilómetros de profundidad.
En tanto, en la ciudad de Santiago de Chile, hubo réplica de 5,2 con epicentro en Salamanca.
El periodista Gabriel Martella, quién está en el lugar, contó que este tipo de réplicas se presentan habitualmente, por tanto los chilenos actúan de manera tranquila.
Los grandes antecedentes que tiene el país trasandino y la educación, hicieron que la población tomara los recaudos necesarios y sabe cómo actuar frente a estos episodios.
No se registraron heridos ni daños. El alerta de tsunami cesó hace algunas horas.
Lo que ocurrió entre el jueves y viernes
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), que depende del Ministerio chileno del Interior, indicó que el sismo se percibió con una intensidad de VI grados en la escala de Mercalli, que va del uno al doce, en la localidad de Quillagua, en la región de Antofagasta.
En Iquique y Alto Hospicio, en la región de Tarapacá y que fueron los lugares más afectados por el terremoto del martes, el temblor alcanzó los IV grados Mercalli.
Y en Arica y Cuya, en el extremo norte de Chile, el sismo fue de V grados de intensidad, según el informe de la Onemi.
El organismo subrayó que no se han reportado daños personales ni alteración de los servicios básicos o de infraestructura como consecuencia del temblor.
Además, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) indicó que el movimiento telúrico no tiene las condiciones para poder generar un tsunami en las costas chilenas.
Desde el terremoto de 8,2 grados Richter del martes pasado, más de 265 temblores han sacudido la zona norte de Chile, de los cuales una treintena han sido percibidos por la población.
En las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá aún hay miles de personas sin electricidad ni agua potable en sus hogares y muchas viviendas sufrieron daños de diversa consideración.