La epidemia de violencia que vive esta ciudad, con más de 70 homicidios este año, sumó otro capítulo con la venganza callejera concretada por vecinos.
Dos motochorros atacaron a una mujer el sábado pasado en el barrio Azcuénaga, zona de casas de dos pisos, de clase media, de vecinos que se conocen entre sí en el trato cotidiano. La mujer caminaba con su hija de dos años. Gritó. Los dos jóvenes asaltantes huyeron con la cartera como botín. Pero algo salió mal, la motocicleta no alcanzó velocidad para el escape y varias manos anónimas tomaron a uno de los asaltantes. Lo golpearon salvajemente. Ayer murió, tenía 18 años, se llamaba David Moreyra y fue linchado por vecinos de Rosario.
La epidemia de violencia que vive esta ciudad, con más de 70 homicidios este año, sumó otro capítulo con la venganza callejera concretada por vecinos.
El presidente de la Asociación Vecinal Barrio Azcuénaga, Oscar González, rechazó esa forma de actuar de vecinos: "Estoy seguro de que por la cabeza de muchos de los vecinos que participaron en ese hecho hoy, al conocer el fatal desenlace, sentirán un enorme arrepentimiento porque el ser humano no se puede comportar como se ha comportado en esta oportunidad".