Correrá entre la vieja estación provincial de La Plata y Avellaneda; se prevé que el viaje demandará poco menos de una hora, con frecuencias de entre 15 y 20 minutos; reciclarán las 14 estaciones
Tras más de 36 años de letargo y varios intentos de reactivación frustrados, el gobierno bonaerense trabaja en la recuperación del servicio de pasajeros en el antiguo tendido ferroviario abandonado que une esta ciudad con Avellaneda a través del corazón del conurbano sur.
La iniciativa demandará una inversión de unos 40 millones de dólares e impactará en un área de influencia en la que viven unos seis millones de personas. En una primera etapa se recuperará la traza entre la estación provincial original, en el barrio platense de Meridiano V, hasta la de San Francisco Solano, Quilmes. En una segunda instancia, se pretende restablecer el tendido para que el servicio llegue a Avellaneda.
Según estimaciones de las autoridades provinciales, el primer tramo, que incluye nueve estaciones, debería estar terminado en junio de 2015.
El proyecto se presenta como "Sistema de transporte público masivo moderno tipo LRT" (tren liviano). Se prevé que el tránsito entre las 14 estaciones demandará 55 minutos, con frecuencias de 15 minutos en hora pico y de 30, el resto del día.
Días atrás, el gobernador Daniel Scioli adelantó la iniciativa en su mensaje ante la Legislatura provincial, al abrir el 142° período de sesiones ordinarias: "Desde Buenos Aires, en una trocha abandonada por tres décadas entre La Plata y Avellaneda, desarrollaremos con capitales privados el Tren del Sur, para 10 millones de pasajeros potenciales al año", dijo.
El ramal de Avellaneda a La Plata, denominado por entonces P1, incluido en el servicio del Tren Provincial, inició sus servicios a fines de 1926, con un recorrido de unos 51 kilómetros. El 6 de julio de 1977, una disposición del gobierno militar decretó su salida de funcionamiento como transporte de personas.Aquel ferrocarril había pasado a manos del Estado Nacional en diciembre de 1951, a partir de un plan de nacionalización de los trenes iniciado por el presidente Juan Perón en marzo de 1948; luego, en 1993, durante el gobierno de Carlos Menem, el ramal fue transferido a la provincia junto con el servicio a Mar del Plata y quedó bajo la órbita de la Unidad Ejecutora del Programa Ferroviario Provincial (Uepfp), que en reiteradas oportunidades estudió infructuosamente su recuperación.
Grupos de vecinos de las distintas localidades por donde pasaba el tren luchan desde hace años para reactivar el ramal. Incluso, varios gobiernos alentaron la recuperación del ramal a Avellaneda, que nunca terminó por concretarse.
Durante mucho tiempo se estudió la viabilidad del restablecimiento del servicio y, alternativamente, una variante para transformar el trazado en una vía para la circulación de ómnibus. De hecho, en agosto 2007 -la última vez que desde la provincia se habló del tema-, el gobernador Felipe Solá anunció un proyecto llamado Transporte Público Transur (TPT), un sistema de transporte de pasajeros con circulación exclusiva de ómnibus de alta velocidad sobre la antigua trocha ferroviaria. No prosperó.
Ahora, el proyecto, que fue bautizado Tren del Sur, unirá en una primera etapa La Plata, Berazategui y Florencio Varela. Luego se continuará con las obras, que pasarán por Almirante Brown, Quilmes, Lomas de Zamora, Lanús y Avellaneda.
Scioli dejó la iniciativa en manos de la flamante Secretaría de Planificación y Servicios Públicos bonaerense, conducida por Franco La Porta. La tarea no será sencilla. El funcionario convocó a los intendentes de la zona y comenzó a trabajar junto con Ferrobaires. En la primera etapa, que ya se puso en marcha la semana pasada, se hará un relevamiento de todo el trazado y de las estaciones para analizar su reutilización o descarte. En la segunda fase de la obra la provincia deberá resolver casos de intrusión sobre los terrenos ferroviarios.
"Invertiremos para generar un servicio alternativo que descomprima las vías de comunicación existentes y ofrezca una alternativa de transporte rápida, segura y accesible", destacó La Porta. Agregó: "De esa manera, se brindará un servicio en la zona sur del conurbano, donde la densidad de las líneas de explotación es considerablemente mayor que en la zona norte. Estimamos que, en promedio, alrededor de diez millones de usuarios lo utilizarán cada año". En la propuesta de las autoridades bonaerenses se destacó que la expectativa de venta de pasajes es de 18 millones anuales.
Según las autoridades, la recuperación de ese ramal significará también poner en valor el patrimonio histórico provincial de la infraestructura que se conserva en las estaciones terminales e intermedias, con fines culturales y de esparcimiento. La idea es que los privados aporten para la compra de material rodante, vías y señalización a cambio de la concesión de espacios comerciales a lo largo de la traza, que tendrán como incentivo la instalación de diversas oficinas provinciales de gestión.
También se prevé identificar el estado de las estaciones para comenzar a trabajar en su puesta en valor y reacondicionamiento.