El Seleccionado de Sabella no logró demostrar todo su potencial y se tuvo que conformar con el empate sin goles en el último amistoso previa a la lista de 30 jugadores
Argentina empató sin goles frente a Rumania, en Bucarest, y dejó una pálida imagen en el último partido amistoso antes de que Alejandro Sabella entregue la lista para el Mundial. Más allá del resultado, el equipo no encontró los caminos y evidenció falencias importantes.
La Albiceleste salió a la cancha con la novedad del ingreso de José Basanta por Ezequiel Garay, a raíz de una entorsis de tobillo. El resto fueron los que el entrenador utilizaría para el debut en el Mundial, el 15 de junio frente a Bosnia Herzegovina en el Maracaná.
Lo demostrado en el Estadio Nacional de Bucarest estuvo muy lejos de lo esperado, más que nada a falta de 99 días para el debut en la Copa del Mundo. Otra vez hubo dudas en defensa, poca movilidad en el traslado de la pelota y escasa explosión en ataque para el potencial que se posee.
Lo único de la etapa inicial fueron dos apariciones por derecha de Gonzalo Higuaín: la primera la tapó el arquero y en la otra lo trabaron justo a Sergio Agüero. El Kun tuvo la más clara tras una gran acción individual, pero el guardameta se quedó con la definición del delantero.
El dueño de casa, que no se clasificó al Mundial por haber caído en el repechaje con Grecia, pudo abrir el marcador con un cabezazo de Ciprian Marica que Sergio Romero salvó al corner. Además, el árbitro italiano Gianluca Rocchi le anuló un gol a Rumania por posición adelantada.
La actuación de Lionel Messi fue de menor a mayor, con un primer capítulo muy flojo y una segunda parte bastante mejor aunque lejos de su nivel. Su mejor intervención en aquellos 45 minutos iniciales fue una asistencia de primera a Ángel Di María, quien falló en la definición.
En el complemento, Argentina subió la producción y contó con situaciones claras para marcar. El problema fue la falta de contundencia, que Ciprian Tatarusanu se convirtió en figura y que a Agüero le sacaron en la línea una chance inmejorable, luego de haber eludido al arquero.
La más increíble fue una tapada del guardameta tras un disparo del ingresado Ezequiel Lavezzi, cuando parecía que la pelota entraba al arco. También perdieron sus oportunidades en acciones similares Rodrigo Palacio -otro de los que entró- y Di María, quienes se la llevaron por delante.
Para ese entonces ya habían salido Fernando Gago, otra vez de floja actuación, Agüero e Higuaín. El tercero que se metió en la cancha fue Lucas Biglia, para intentar colaborar con Javier Mascherano en un mediocampo que queda expuesto cuando se tiene la pelota y se ataca.
Las próximas y últimas tres escalas para el Mundial están casi a la vuelta de la esquina. La primera será la lista de Sabella, que en principio no tendría novedades, la segunda será el amistoso con Trinidad y Tobago, el 4 de junio en el estadio Ciudad de La Plata, y la despedida será el 7 contra Eslovenia, en el Monumental.