Encontraron pelos rubios en asientos del Peugeot 206 que conducía el detenido. Realizarán examen de ADN para confirmar si son de la vecina de Inriville que está desaparecida.
Cabellos rubios fueron encontrados en las últimas horas en el auto que usaba el expolicía Jorge Orellano (58), quien permanece detenido como supuesto autor de la desaparición de Mariela Bortot (40), la vecina de Inriville de quien nada se sabe exactamente hace un mes.
Esos pelos, hallados en dos asientos del Peugeot 206 gris que usaba Orellano (para vigilar el campo del intendente de aquella población, Marcos Rodrigué), serán sometidos a pericias de ADN. Si el cotejo de ese material con el perfil genético de Mariela es coincidente, la situación del exuniformado se vería comprometida.
El hallazgo de los cabellos fue confirmado a La Voz del Interior por fuentes con acceso a la causa, quienes indicaron que el fiscal Gustavo Zucchiatti tiene que resolver en los próximos días si dicta la prisión preventiva contra Orellano o si bien lo deja en libertad.
El expolicía está imputado por privación ilegítima de la libertad agravada.
Mariela Bortot desapareció el pasado 25 de enero cuando salió a caminar por las afueras del pueblo. Una ojota suya fue hallada a la vera del río Carcarañá en el campo del intendente Rodrigué. Sin embargo, a pesar de los intensos rastrillajes realizados en todo el lugar, no se encontró nada más.
A todo esto, la familia de la mujer, separada y madre de dos chicas, insiste que la mujer fue “raptada” y exige que sea encontrada cuanto antes.
Si bien en las últimas horas había corrido el rumor de que había sido detenida una mujer allegada a Orellano, en el marco de la desaparición de Mariela, fuentes oficiales lo descartaron. En realidad, esa persona fue cambiada de domicilio y se le asignó custodia por un caso de violencia familiar.
Jorge Antonio Orellano (58) fue detenido poco después de que se encontrara la ojota de Mariela en el campo del intendente.
En rigor de verdad, el exsargento de la Policía de Córdoba venía siendo investigado desde hacía varios días.
Fuentes de la causa señalaron que los indicios que lo vinculan son: manejaba un auto gris (la última persona que vio viva a Mariela relata que cerca suyo divisó un auto de ese color); presuntos mensajes de texto de su celular al de la mujer, invitándola supuestamente a mantener una relación; y filmaciones de una cámara de seguridad de una estación de servicio en las que se lo vería embarrado y nervioso, la jornada que desapareció la mujer.
Ahora se sabe que el fiscal cuenta con la huella de un borceguí en proximidades de donde apareció la ojota. “Tenemos la firme sospecha de que esa pisada pertenece a Orellano. Es una pisada compatible con la de alguien que se resbala. Y no es de los policías que realizaron la búsqueda, porque no habían pasado por allí”, dijo ayer el abogado Horacio Baleani, quien representa a la familia Bortot.
“Él niega haber usado borceguíes, pero sabemos que sí usaba. Él ha incurrido en varias contradicciones”, añadió.
Orellano ya fue indagado por el fiscal y negó toda vinculación con el hecho. “Él conocía a Mariela de vista, de la estación de servicio, pero no tenía ninguna relación personal. Él no tiene nada que ver con el caso”, afirmó, días atrás, su abogado defensor, Francisco Lavisse.
El letrado denunció que su cliente fue golpeado en dos oportunidades por los policías que investigan el caso, por lo que radicó una denuncia judicial.
La presunción de los investigadores es que Orellano habría atacado a la mujer (sospechan de un abuso sexual) y la habría hecho desaparecer, dado que supuestamente insistía para que salieran juntos e intimaran, algo a lo que ella se habría negado varias veces.
Marcha
En tanto, familiares y allegados a Mariela Bortot organizan una marcha que se realizaría mañana en la ciudad de Corral de Bustos. La intención llegar hasta los Tribunales para exigir el esclarecimiento del caso.
La convocatoria coincide con el cumpleaños de la mujer.
Está previsto que la marcha parta desde la plaza 25 de Mayo de la ciudad y concluya frente al edificio judicial, donde trabaja el fiscal Zucchiatti.