Con el hotel marplatense Presidente Perón como escenario, finalmente tuvo lugar en esa ciudad balnearia la cumbre sindical encabezada por Moyano y Barrionuevo, que contó con la presencia de varios líderes gremiales que por estos tiempos se encuentran en la vereda opuesta a la del Gobierno.
Durante el plenario, el líder camionero y el titular de Confederación General del Trabajo (CGT) Azul y Blanca lanzaron críticas contra el Ejecutivo y también cargaron contra aquellos "presidenciables" que habían sido invitados, pero desistieron de asistir al cónclave sindical. Se trata de Sergio Massa, Daniel Scioli y José Manuel de la Sota.
Al tomar la palabra, Moyano sostuvo que "en este gobierno se duplicó la pobreza y la falta de trabajo porque no han sabido gobernar" y criticó al kirchnerismo al advertir que "para ellos parece que la patria se formó recién en el 2003". "Tenemos que volver al peronismo porque cuando vemos a alguien durmiendo en la calle, no nos debe dar lástima sino vergüenza. Eso está pasando", reclamó el jefe de la central obrera disidente al tomar la palabra en hotel perteneciente a la Unión de Trabajadores Hoteleros, Gastronómicos de la República Argentina.
Por su parte, Barrionuevo sostuvo que la reunión "se hizo para buscar la unidad con todos, sin exclusiones, como lo hicimos en otras oportunidades" y, según dijo, apunta "a la paz social".
A la vez, expresó que su acercamiento a Moyano "no es una reunión corporativa o para entorpecer al Gobierno" y aclaró que "de nosotros no va a salir una desestabilización y solamente no vamos a dejar de reclamar los intereses del movimiento obrero".
Críticas a los ausentes
Barrionuevo, cargó duro contra los potenciales precandidatos presidenciales Massa, Scioli y De la Sota por desistir su participación en el plenario sindical. "Si no tienen huevos que no vengan (sic)", desafió el dirigente gastronómico. "Queríamos saber sus propuestas, ya que quieren ser presidentes. Ya van a venir cuando nos necesiten", agregó Barrionuevo.
En tanto, Moyano opinó que los ausentes decidieron no concurrir por "miedo a la foto". Pero advirtió que cuando esos dirigentes "se sacan la foto con (Amado) Boudou, con Julio De Vido, con (Ricardo) Jaime, ¿no sienten nada en la piel?, esas si son fotos para aguantarlas".
"Algunos políticos le huían a la foto con los dirigentes, y no cabe duda que ha sido promovido por el gobierno nacional en el desprecio a la dirigencia gremial. Un desprecio que es hasta odio para algunos dirigentes gremiales. Pero a aquellos que nos gobiernan les decimos que hay odios que honran", señaló Moyano.
Agregó: "Si estos personajes nos odian es porque seguramente se ven reflejados en no dar soluciones a quienes reclaman".
Barrionuevo, sin embargo, compartió una foto con el gobernador bonaerense y el líder del Frente Renovador el viernes pasado, en la inauguración del Casino del Hotel Sasso, que pertenece al sindicato de los Gastronómicos.
Fernández, de la CGT oficialista a la disidente
Uno de los participantes de la cumbre sindical fue Roberto Fernández, de la Unión Tranviarios Automotor, alineado a la CGT que conduce el líder metalúrgico Antonio Caló. "No vengo en representación de alguna CGT sino porque más que nunca tenemos que estar unidos y porque demandamos los mismos derechos", señaló al ser consultado sobre el tema.
Fernández también se refirió a la ausencia de los políticos invitados. "Algunos dicen que somos `piantavotos` pero nosotros no gobernamos", ironizó al respecto.
Finalmente, el Gerónimo "Momo" Venegas, representante de los trabajadores rurales, insistió en "que vengan todos los dirigentes gremiales, porque los destinos del país se cambian desde la CGT" y calificó a la reunión de hoy en Mar del Plata como "un antes y un después" en el sindicalismo argentino.
Fuente: Infobae.com