"No hay posibilidad de que la Justicia avance seriamente en esto", dijo en una entrevista consultado sobre las operaciones del empresario kirchnerista
El presidente de la Unidad de Información Financiera (UIF) José Sbattella, rompió el silencio luego de quedar bajo la lupa por su actuación en el caso Lázaro Baéz y por la presunta comisión de múltiples delitos eirregularidades en el organismo encargado combatir el lavado de activos.
El funcionario avalado por el kirchnerismo se defendió hoy en una entrevista con el diario Perfil.Sobre el caso Báez, y las operaciones sospechosas que habrían sido ocultadas a la Justicia durante cinco años, Sbatella afirmo que "no hay pruebas de que se haya cometido un ilícito".
Y justificó: "La UIF investigó ese caso desde antes de que yo asumiera la conducción. Y avalan las transacciones de dinero con la financiera SGI porque esos fondos provienen de actividades de la construcción y están los certificados de obra que emite el Estado como prueba".
Sbatella agregó: "Los certificados de obra en este caso probaban el origen de los fondos. Cuando aparece la denuncia a partir de la operación de Jorge Lanata, el juez de la causa pide a la UIF si tiene antecedentes de los hechos, y ahí se lo entregamos al juez. Pero repito, para probarse el delito de lavado tiene que probarse que el dinero era mal habido, y eso lo tiene que probar la Justicia, no la UIF".
"NO HAY POSIBILIDAD"
Consultado sobre los millonarios pagos que el empresario kirchnerista Lázaro Báez hizo de habitaciones en los hoteles de los Kirchner, el titular de la UIF manifestó que no tuvieron operaciones sospechosas sobre esas gestiones porque "es información que surge de la contabilidad de la empresa, que debe estar en la Anses o en la AFIP".
Sbatella no se mostró dispuesto a avanzar sobre las operaciones de Báez con el matrimonio presidencial. Dijo que la denuncia de Lanata "fue todo un ridículo". "Se presentaron testigos que después se desdijeron en la Justicia. No hay posibilidad de que la Justicia avance seriamente en esto", afirmó.
En tanto, volvió a señalar que no existió un "allanamiento" en la UIF sino que se trató de un "requerimiento" por parte del juez Claudio Bonadio.