Era un despegue más en el Aeropuerto Internacional de Johannesburgo, Sudáfrica, pero pudo tener consecuencias insospechadas.

Una aeronave Boeing 747 perteneciente a British Airways, impactó con una de sus alas un edificio de servicios cercano a la pista mientras realizaba las maniobras de despegue, lo que obligó a la rápida evacuación de los 182 pasajeros que se encontraban a bordo.

Uno de los evacuados, Harriet Tolputt, aprovechó la emergencia para plasmar en su cuenta de Twitter los daños que la aeronave y el edificio sufrieron a través de fotografías, junto con escribir que "nadie (resultó) lesionado, solamente el orgullo del piloto".

Tras el incidente, la línea área a través de un comunicado de prensa indicó que "hemos puesto en marcha una investigación completa sobre el incidente y estamos dando nuestra asistencia a la Autoridad de Aviación Civil de Sudáfrica", según consigna CBS.

Según informaron las autoridades sudafricanas, no se registraron pasajeros lesionados, los cuales fueron trasladados hasta un Hotel a la espera de poder reemplazar el avión, el cual no podrá volar.