Kitty Sanders, una periodista argentina (de origen ruso) que se ha especializado en el tema de trata y tráfico de personas, dialogó con Mabel Sánchez y comentó que se infiltró en burdeles para combatir la trata de personas y durante ocho años investigó la problemática en más de 20 países.

Explicó que "si se quiere investigar un tema criminal, no se puede hacer a través de entrevistas, porque si se investiga el tema narco, no se le puede hacer una entrevista a una persona que te vende droga, ya que te convertís en cliente también".

Agregó que "lo mismo pasa con la prostitución, porque sos cliente de una prostituta y no importa si se quiere comprar su cuerpo o su historia. Por eso entendí que debía ser parte del negocio".

Relató que eligió ser prostituta para investigar prostitución desde adentro de los burdeles, Strip clubs y lugares donde había todo tipo de explotación sexual de chicas y chicos. 

"Nadie sabía que era periodista y que hablo siete idiomas. Todos pensaban que era una joven ilusa que quería plata y por eso conseguí tanta información. No hay otra loca que haya puesto su propio cuerpo para investigar en tantos países un tema tan pesado, doloroso y violento como yo", afirmó

Admitió que fue un autosacrificio, pero que "no pensé en mi misma, sino en cómo podría rescatar a las personas que están dentro".

 -Kitty, ¿tuviste miedo alguna vez?

-Yo entendí desde los primeros momentos que mi vida no valía nada. Estaba en una guerra y cuando estás en una guerra todos son enemigos. Estás ayudando y rescatando, pero no confías a nadie. Y siempre hay peligro. 

-¿Lograste que algunas chicas pudieran ser liberadas de esa explotación? 

-En cada país rescataba en varios burdeles y les daba chance a cada chica y chico que yo rescaté. Después, cómo ellos utilizan ese chance, yo no sé. Porque estaba en otro burdel rescatando a otro, ya que tenía miedo de que me van a descubrir. Por eso, debía tener una velocidad enorme.


-¿Argentina es igual al resto de los otros países del mundo? 

-No es igual, pero también sufre el tema de trata de personas. Hay mucho consumo dentro del país por los turistas, chicos y chicas muy jóvenes, desde 3 o 4 años de edad y venta desde nuestro país hacia el exterior. Cada provincia tiene la presencia del delito de trata de personas, explotación sexual, explotación laboral y venta de órganos. 

Destacó que "hay muchos clientes pedófilos que prefieren varones y por eso hay muchachos de 15 años que están sufriendo mucho prostitución homosexual, a pesar que ellos no son homosexuales".

-En cuanto a los engaños con propuestas laborales, ¿Qué papel juegan en esto las redes? 

-En redes sociales, nosotros publicamos, no solamente nuestras fotos, también nuestra información privada. Entonces, con esa información se les facilita engañar a una chica o un chico a través de sus deseos. 

-¿Cuál es tu principal rol en este momento en la Argentina? 

-Mi principal rol es prevenir ese delito. Por eso doy charlas de prevención para juventud, aclarando el peligro de las redes de trata, cómo actúan a través de redes sociales, quién es un proxeneta, cómo lo engañan, qué tipo de ofertas pueden hacer y dónde se puede denunciar ( línea anónima nacional 145) y en mi Instagram, kitty1-sanders, se puede pedir ayuda. Además, para los profesores, papás y mamás.

El espejo de otra guerrera

Por otro lado, comentó que su abuela, una veterana de Segunda Guerra Mundial, le da principios. 

"Ella me da todo para luchar, porque es la guerra más silenciosa del mundo contra la esclavitud y una de las mayores recaudadoras de dinero en el mundo", cerró. 




Imagen: La Nación