El gremio de choferes de Córdoba declaró un paro de 48 horas, para el miércoles y jueves, en protesta porque sus delegados no pudieron ingresar a una audiencia de licitación del transporte, mientras que la Municipalidad pedirá que se declare la ilegalidad de la medida de fuerza.
 
El paro fue confirmado durante la noche del martes por Alfredo Peñaloza, titular de la UTA. "Es por la discriminación que sufrimos en la apertura de los pliegos", aseguró el dirigente, quien dijo que en el proceso de licitación "están en juego las fuentes de trabajo de 1.500 familias".
 
La medida ya afecta  a todas las empresas de transporte de la ciudad y se resolvió el martes por la noche durante una asamblea de delegados en la sede del gremio.
 
En tanto, el secretario de Transporte, Juan Pablo Cardeilhac, dijo que la Municipalidad solicitará que se declare la ilegalidad del paro y pidió que se restablezca el diálogo, al tiempo que volvió a garantizar las fuentes laborales.
 
Un mecánico del transporte urbano de pasajeros resultó baleado en la ingle el martes por la noche durante un confuso episodio.
 
Cuando la manifestación se descomprimió, luego de la reunión que delegados mantuvieron en la sede del gremio, se registró un nuevo cruce entre efectivos policiales y manifestantes. Hubo un disparo, que impactó en la ingle del empleado.
 
A raíz del incidente, el lesionado recibió la asistencia de un servicio de emergencias y luego fue trasladado al Hospital de Urgencias.
 
Día complicado
 
El martes fue una jornada marcada por múltiples piquetes en puntos estratégicos de la capital de Córdoba, caos en el tránsito, destrozos en la sede de la Municipalidad, agresiones verbales a ciudadanos y amenazas a periodistas.
 
Miles de pasajeros se quedaron sin servicio en todos los corredores del transporte, mientras esperaban en las paradas. Hubo caos en las principales avenidas del centro por los piquetes y la quema de cubiertas.
 
El edificio de la Municipalidad, en pleno centro de la ciudad, estuvo sitiado por unidades del transporte que los choferes cruzaron en las calles circundantes. Los choferes arrojaron tuercas y piedras que destrozaron vidrios de la planta baja y el primer piso del edificio, informaron fuentes del Palacio 6 de Julio.
 
También se registraron agresiones a pasajeros, que en algunos casos dijeron haber sido obligados a bajarse de los colectivos. Los choferes amenazaron a cualquiera que intentara registrar los incidentes con sus teléfonos celulares, dijeron testigos. Hubo escaramuzas frente al Patio Olmos que fueron controladas por la Policía.
 
El origen
 
La protesta se desencadenó el mediodía del martes cuando más de 40 delegados y dirigentes de la mesa ejecutiva de UTA no lograron ingresar a una audiencia en la que se abrieron los sobres de la licitación del nuevo sistema de transporte, informaron funcionarios municipales.
 
Adrián Lentini, vocero de la UTA, indicó a este medio que las autoridades no los dejaron entrar a la audiencia pública. "Si no nos dejaron entrar a una audiencia pública no somos los responsables, no sé por qué no nos dejaron entrar. En un principio, no nos dejaban entrar a ninguno y después nos dijeron que uno o dos", añadió a Mitre.
 
“Hemos acompañado este proceso de la manera más fácil que hemos podido, la responsabilidad de que los usuarios no tengan transporte no es de la UTA sino de las autoridades. Nos invitaron cordialmente a asistir, éramos todos integrantes de la junta ejecutiva y delegados", dijo.
 
El secretario de Gobierno, Facundo Cortés Olmedo, dijo que los delegados estaban invitados a participar del acto en la Municipalidad, pero que la cantidad de representantes de UTA que pretendían ingresar a la audiencia excedía la capacidad física del lugar.
 
Cardeilhac explicó que desde la UTA “hubo un planteo para que entraran todos, lo cual por espacio físico no lo pudimos aceptar”.
 
Fuente: La Voz del Interior