Carlos Rottemberg: “No hay fórmula para el éxito en el teatro, es pura piel”
- 18/10/2024 10:28 hs
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Con más de mil títulos estrenados, el productor detalla los desafíos de su próxima producción: “La Sirenita”. Además, cuenta cómo se prepara para la temporada de verano en Mar del Plata y anticipa su gran apuesta para 2025: una Fábrica de Arte Contemporánea en San Telmo.
El video dura apenas unos segundos y quien lo muestra, desde la pantalla de su celular, es Carlos Rottemberg. “Este material es inédito. Lo grabé en el mes de julio en Londres”, anticipa y pone play. Lo que se ve, a continuación, son sus dos hijos menores, Matilda (5) y Nicolás (8), fruto de su relación con Karina Pérez Moretto. “Queremos que se haga La Sirenita en Buenos Aires”, dicen a dúo los pequeños mientras sostienen un póster del personaje. Del otro lado de la cámara, se escucha la voz del productor teatral. “¿Sí? ¿Por qué Matilda?”, pregunta. “Porque nos gusta mucho. Y es muy linda. Y vuela”, dicen los niños. “Bueno, vamos a hablar con todos para que se haga”, promete él. “Sí, dale. ¡Sirenita! ¡Sirenita!”, festejan ellos.
La reacción de Matilda y Nicolás, cuenta ahora Rottemberg a Teleshow, lo impulsó a embarcarse en este ambicioso proyecto que llevará adelante de la mano de su hijo mayor Tomás, MP Producciones (Mariano Pagani y Maga Altman) y Ozono Producciones (Fernando Moya y Pablo Kohlhuber). El icónico musical, basado en el cuento de Hans Christian Andersen, ya tiene fecha de estreno: 30 de mayo de 2025 en el Gran Rex.
“El valor agregado de este espectáculo es que tenemos a los programadores más jóvenes del mundo. En un momento donde todo es fugaz, donde todo pasa por las redes sociales, los chicos eligieron una historia de hace 200 años. Cuando empecé en El Ateneo, yo pasaba la película Los cuentos de Andersen”, recuerda Carlos. Hace una pausa y sigue. “Lo dije con Matilda (2023) y después con School of Rock (2024): nosotros vamos a producir solamente espectáculos a los cuales llevaríamos a nuestros hijos. Y lo estamos cumpliendo. Si bien La Sirenita es una obra pensada para niños, buscará atraer a un público más amplio, incluyendo adultos”, dice.
De cara al desembarco en el Rex, este miércoles, los Rottemberg, MP y Ozono anunciaron las audiciones para elegir a la protagonista del proyecto. Serán los días 28 y 29 de octubre en el teatro. La convocatoria fue increíble: se postularon 1.723 aspirantes para cubrir el rol de Ariel, la protagonista.
Medio siglo con el teatro
Este 2024, Carlos Rottemberg cumple cincuenta años ininterrumpidos como empresario del mundo del espectáculo. La historia cuenta que descubrió su vocación a los 8, cuando lo llevaron a ver La novicia rebelde y prestó más atención al público que a la película. Empezó con el cine y terminó dedicándose al teatro. Cenó con Alberto Olmedo la noche anterior a su muerte y fue productor de Mirtha Legrand en la televisión (y artífice de su regreso a la pantalla chica, en 1990). A lo largo de su carrera estrenó 1.008 títulos, entre ellos, Brujas, la comedia que lleva 33 años en cartel y que, este verano, se retirará de los escenarios.
En esta charla con Teleshow, repasa su trayectoria, se adelanta a la temporada de verano en Mar del Plata y anticipa su gran apuesta para 2025: la Fábrica de Arte Contemporánea en San Telmo.
—Arranca la temporada de verano. El año pasado hiciste una apuesta fuerte en Mar del Plata y fijaste el valor de las entradas a un “precio amigable”. Para este 2025, ¿pensás hacer algo similar?
—Yo, como siempre cuento, pasé por todas: hiperinflación, australes, corralito, patacones, peso, dólar, dólar negro, dólar blue, epidemia de la Gripe A en 2009 y la pandemia del Coronavirus en el 2020. Entonces, sigo adelante, mirando con un ojo la coyuntura y, con el otro, la continuidad de la ficción teatral, que para mi pesa más. Este año también voy a implementar el “precio amigable”. Además, estoy cerrando con algunos bancos para que la gente pueda pagar con descuento y en cuotas sin interés. Voy a tratar de que ir al teatro en Mar del Plata sea lo más fácil posible, de que la curva que pasó el año pasado, donde todo bajó y el teatro creció, siga potenciándose. Todo eso lo voy a anunciar el martes 26 de noviembre, cuando haga la presentación de la temporada en La Feliz, donde vamos a estar con 10 obras. Entre ellas, Tom Dick y Harry con Mariano Martínez, Yayo y el “Bicho” Gómez; Quieto, con Florencia Naftulewicz y Miguel Ángel Rodríguez; Mamma Mía!, con Flor Peña; Brujas con tres históricas como Nora Cárpena, Moria Casán y Graciela Dufau, más Luisa Kullock y María Leal; El equilibrista, con Mauricio Dayub; Ariel Tarico y David Rotemberg; La Jenny con Wali Iturriaga; El amateur, con Mauricio Dayub y Gustavo Luppi; y los hermanos Eugenio y Culini Weinbaum con su ciclo MDQ de televisión. Solo me falta confirmar una obra. Siempre trato de tener una cartelera muy ecléctica, muy abarcativa y para todos los gustos.
Los Rottemberg: Tomás y Carlos—Se habla mucho de la falta de ficción en televisión. ¿Cómo describirías el presente del teatro?
—Cuando alguien me dice: “Vos no producís televisión” o “No te interesa la ficción”, yo digo que sí, que me interesa la ficción en el teatro, que es uno de los sustitutos que tiene la comunidad artística para desarrollarse, incluso desde el punto de vista monetario, ante la falta de ficción televisiva. Soy del PT: Partido Teatral. Y como siempre digo, soy privado. Eso, por un lado, me da libertad y, al mismo tiempo, es el camino más difícil porque tenés que estar permanentemente buscando al público.
—A lo largo de tu carrera estrenaste más de mil títulos. ¿Hay algún secreto para que una obra sea exitosa?
—Muchos me preguntan por el éxito con el hecho consumado. “¿Cómo pensaste que iba a pasar?”, me dicen. “De la misma manera que con los fracasos: sin habérmelo imaginado”, contesto. No hay una fórmula. El teatro no tiene palabra de honor. Es lúdico. Es el momento, es el cómo terminó saliendo, es... El porqué de un éxito no se estudia, es piel.
—Pero, por ejemplo, La Sirenita, no se te cruza por la cabeza que puede fallar. ¿O sí?
—¡¿Y cómo no se me va a cruzar por la cabeza?! Yo soy el mismo a quien se le mató Alberto Olmedo produciéndolo en Mar del Plata. Soy el mismo que en 2009 y en 2020 tuvo cerrar todos los teatros del país por la Gripe A y por la Pandemia. Soy el mismo que conoce la coyuntura económica de Argentina y soy el mismo que sabe que nuestra mercadería, nuestra materia prima, para decirlo mejor, son seres humanos. Por supuesto que puede fallar. Cuando hacíamos Piaf, en el Teatro Liceo, hubo un sábado que Elena Roger se quedó sin voz. Yo me acerqué al teatro, que estaba lleno, y devolví todas las entradas. En el intercambio un señor me dijo: “¿No podrían haberlo arreglado de otra manera?”. Me acuerdo de que lo llevé a un costadito y le dije: “¿Usted qué vino a ver?”. “Piaf con Elena Roger”, me contestó. Entonces lo miré y le dije: “Le cuento: tengo una tía que canta como Piaf. Si yo le propongo que usted vea hoy la obra sin Elena Roger, pero con mi tía ¿usted se queda?”. Me dijo que no. El teatro, por lo que perdura al lado de la tecnología, es porque es lo único artesanal. Es el vivo. No creo que el hecho vivo, las artes escénicas e incluso la música en vivo, vaya a caer. Porque tuvo oportunidad de caerse durante siglos y no se cayó nunca. Yo siempre le digo a los actores: “Diez minutos, podés engañar a una platea. Una hora y media, si no sos bueno, te chiflan”. Acá no es como en la tele, que si una escena sale mal, repetís la toma. Acá si no tenés talento, no tenés talento.
Su gran apuesta para el 2025
Además del estreno de La Sirenita, para el año que viene, Carlos Rottemberg tiene otro “As” bajo la manga. Se trata de la Fábrica de Arte Contemporánea (FAC). “Será un espacio donde se fusionarán todas las disciplinas del arte. Algo así como varios Multiteatros juntos”, dice y arranca con la historia de este imponente proyecto familiar.
Carlos muestra los planos de la Fábrica de Arte Contemporáneo. "Es la apuesta más grande de nuestras vidas”, dice“La idea nació de mi padre, un hombre visionario que, a los 70 años, compró un terreno en San Juan y Perú, en San Telmo, donde antes había una estación de servicio abandonada. A pesar de que el terreno no podía usarse de inmediato, mi padre decidió invertir en él. Y Pablo, mi sobrino, hijo de mi hermana, que hoy tiene 30 años y en ese momento tenía 18, le dijo: ‘Yo te acompaño en el día a día’. Al final, cuando papá cumplió 80 y pico, le otorgaron la autorización para que pudiera hacer algo. Al principio, pensó en hacer un edificio, pero después mi viejo se enfermó y murió en abril pasado. En paralelo, su hermano, que es un artista fotográfico que trabaja en Barcelona, en Israel, en Cuba, e inventó la fábrica de arte cubano en La Habana, nos dijo: ‘¿Saben lo que habría que hacer acá? Una Fábrica de Arte Contemporánea’”, repasa Carlos.
“Como familia nos pareció un gran proyecto. Es un edificio de diez pisos. En este momento estamos terminando lo que falta, que tiene que ver con los planos municipales, para los cuales me reuní con el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri; con la ministra de Cultura de la Ciudad, Gabriela Ricardes; con el secretario de Cultura de Nación, Leonardo Cifelli; y con Néstor Grindetti, que es el jefe de Gabinete de CABA. Lo interesante es que, además de las salas de exposición, habrá 100 habitaciones, todas dedicadas al arte. Será un hotel donde los huéspedes no van a pedir la ‘Habitación 140′, sino la habitación dedicada a un artista específico. Esperamos inaugurarlo el 18 de abril de 2025, en coincidencia con el primer aniversario de la muerte de mi papá”, cuenta.
Antes de despedirse, y a modo de balance por estas cinco décadas dedicadas al teatro, Carlos reflexiona: “Esta empresa creció y se convirtió en lo que es gracias al público. Yo soy de los que creen que la rueda gira virtuosa, cuando se reinvierte lo que la rueda produce en la misma profesión. Y yo, en eso, lo transito muy fácil, muy a la vista. Cuando hay muchos éxitos, y el país lo permite un poquito más, construyo un teatro. Ahora estamos en una etapa donde no está sobrando nada. Entonces no puedo estar construyendo un teatro. Estamos con otra historia familiar que es increíble, que es muy superior a un teatro, y es una Fábrica de Arte Contemporánea. Es, sin duda, la apuesta más grande de nuestras vidas”.