River sacó un valioso empate 1-1 en Chile para comenzar la serie de cuartos de final de la Copa Libertadores ante Colo-Colo. El equipo de Jorge Almirón le propuso un partido áspero y caliente al elenco de Marcelo Gallardo, con mucho roce, cruces, patadas y hasta un expulsado por lado (Paulo Díaz y Maximiliano Falcón). Y esa forma de jugar el primer mano a mano no fue gratis para el Millonario, que ahora debe seguir con detenimiento la situación física de tres jugadores que han sido titulares a lo largo del nuevo ciclo del Muñeco: Maxi Meza, Fabricio Bustos y Matías Kranevitter.
El defensor y los volantes no terminaron el cotejo al ciento por ciento, afectados por diversos golpes sufridos a lo largo de los innumerables choques con futbolistas del conjunto rival, sobre todo en el mediocampo, donde Arturo Vidal estaba hecho un león hambriento. De todos modos, el Colo es el que mejor está y tanto él como Bustos podrían entrenarse a la par del resto desde mañana.
Más allá de eso, la idea que sigue prevaleciendo es poner mayoría de suplentes el sábado. Gallardo esperará porque se recuperen la mayor cantidad de jugadores posibles pero no arriesgará ni sobreexigirá a nadie porque Colo-Colo no tendrá acción este fin de semana y eso es una ventaja.
Incluso, salvo por el marcador de punta, los dos centrocampistas tuvieron que ser reemplazados en el segundo tiempo. El ex-Independiente, que ya había acusado un dolor en el aductor producto de un resbalón en un campo de juego rápido, dejó la cancha a los 18 minutos del complemento para que ingresara Rodrigo Villagra. La salida del Colo demoró un poco más: fue sustituido a los 28' por Manuel Lanzini. No es un detalle menor que el otrora jugador del Atlético de Madrid había sufrido algunas lesiones óseas y musculares que lo marginaron de las convocatorias durante la etapa de Martín Demichelis como entrenador.
Los tres fueron revisados por el cuerpo médico del Millonario y constataron que aquellos golpes no revisten demasiada gravedad. Sin embargo, Marcelo Gallardo tendrá un ojo puesto en su mejoría en estos tres días previos al Superclásico del próximo sábado frente al Xeneize, en La Bombonera. Más allá de estos casos, que todavía están lejos de ser descartados de cara a la fecha 15 de la Liga Profesional, River puede jactarse de que no tendrá otras bajas confirmadas de último momento por alguna dolencia.
La pésima noticia para la vuelta es que, tras su infantil discusión por una disputa verbal y física con el central uruguayo Maximiliano Falcón, no estará disponible Paulo Díaz, zaguero clave en el último año para la Banda, con 34 encuentros y dos goles en duelos clave (Talleres -octavos de Libertadores- y Boca, por los cuartos de la Copa de la Liga). El árbitro brasileño Raphael Claus tomó una decisión salomónica y los echó a los dos, por lo que no aparecerán en la cancha el próximo martes en el estadio Monumental de Núñez.
Cómo podría formar River contra Boca en el Superclásico
Si bien es un tanto prematuro porque el empate 1-1 frente al Cacique todavía está fresco, y el plantel aún debe regresar de Chile para entrenarse en el predio de Ezeiza, se estima que el director técnico podría jugársela con un equipo con presencia de suplentes pensando en el cruce de vuelta. Sin embargo, el propio Gallardo, fiel a su estilo, golpeó la mesa en la conferencia de prensa y reveló que la formación la resolverá recién unas horas antes del pitazo inicial del juez Nicolás Ramírez a las 16 horas.
"Primero hay que evaluar las condiciones en las que terminaron los futbolistas hoy, para ver cómo nos recuperamos también. Sabemos la importancia que tiene el partido del sábado para nosotros, para los hinchas, pero en esta seguidilla de mucha intensidad, de mucho roce físico, también hay un partido que da un desgaste lógico. Intentaremos evaluar en estos días quiénes son los que están para jugar", comenzó el DT, y concluyó: "Después del sábado tenemos un día menos de recuperación. Es decir, tenemos poco tiempo de recuperación. Hay que evaluar bien y tomaré la decisión en las horas previas al partido".