Dos bebés se salvaron del incendio de un edificio de Nueva York el pasado miércoles gracias a que los arrojaron por la ventana de un tercer piso a los brazos de un vecino de abajo.
Jermaine Shirley, un empleado de correos salía de su departamento en el Bronx a las 7 am cuando olió humo. Dijo que advirtió a los otros residentes, pidiéndoles que evacuaran pero los habitantes de un departamento del tercer piso no pudieron salir.
"Los escuché gritando por ayuda, así que corrí hacia allí", Shirley contó que corrió a la parte trasera del edificio, y junto a otro hombre iniciaron la tarea de rescate de los dos pequeños niños de apenas 11 meses de edad.
El valiente Jermaine aventó a los gemelos desde lo alto mientras otro grupo esperaba recibirlos abajo con un cobertizo. Cuando los bebés,Israel e Ismael, eran rescatados, su padre Everdean Codner , salió a toda prisa del edificio en llamas.
"Las palabras no pueden explicarlo, hombre", dijo Codner. "Por mi parte, estoy muy agradecido".
"Estoy muy orgulloso de mi marido", dijo la esposa de Shirley; "Él es el único que volvió y golpeó la puerta de todos gritando ¡fuera, fuera. ¡Fuego, fuego!"