Facundo Pereyra fue asesinado el 26 de mayo, mientras trabajaba como remisero, en 12 de Agosto y Gaudard.

El hombre fue trasladado hasta el hospital San Antonio de Padua donde se constató que presentaba un disparo de arma de fuego en zona intercostal y posteriormente sucedió el fallecimiento del mismo.

Un día después se detuvo a 3 menores de edad, de 14,15 y 16 años. Después de varios procedimientos se logró la aprehensión de los delincuentes. 

Un mes después el padre del menor de 14 años fue asesinado por otro adolescente. 

Los menores fueron llevados a un centro de rehabilitación en Córdoba, sin embargo el menor de 14 años fue dado de alta y recuperó su libertad, de acuerdo a la información que se pudo obtener el niño volvió al colegio.

El cuestionamiento que como sociedad debemos hacernos es si un niño de 14 años que es capaz de matar por las circunstancias que tuvo en su vida, se recupera en 2 meses y es capaz de llevar adelante un proceso de transformación tal que  puede volver al colegio y a una vida donde prevalezca la resiliencia de lo vivido.