En el marco del congreso «A Todo Trigo», en nuestro Valor Agregado dialogamos con Ramiro Costa, economista jefe de la Bolsa de Cereales, quien señaló que en los últimos días el escenario cambió para la campaña 2024/25, que está por comenzar.
«A mediados de abril los precios internacionales eran bajos y los costos eran muy altos. Por ende, realmente pensar el trigo de la nueva campaña era un desafío muy grande, pero en los últimos 20 días este escenario cambió a favor de Argentina. Los precios del trigo subieron 30/35 dólares por tonelada, lo cual implica que las relaciones insumo-producto, que se siguen a nivel de producción, han mejorado y que ahora la intención de siembra sea más optimista», expresó.
Resaltó que proyectan un incremento de hasta un 20% en términos de producción.
¿Puede mejorar significativamente las hectáreas de trigo?
Al ser consultado, Costa indicó que «la zona oeste del área agrícola argentina es una de las zonas que más cambió su intención de siembra en este tiempo, porque los márgenes brutos efectivamente eran de los peores que teníamos para toda Argentina. Ante ese escenario, las cuentas no daban, salvo por esquemas de rotación y otros aspectos agronómicos que hacían a la siembra del trigo, y los productores no tenían un escenario muy optimista».
Agregó que «esa área cedió muchas hectáreas en las últimas campañas, es decir, que la siembra que tuvimos el año pasado ya de por sí era baja, pero esta suba de precios y baja de determinados costos generó en esta región un cambio de la decisión del productor y proyectamos que el área se incremente alcanzando hasta un 18%».
Por otro lado, recalcó que «es difícil decir que es un buen precio de cosecha, pero es un precio mucho más alto del que teníamos un mes atrás. 30 dólares por toneladas adicionales pueden marcar la diferencia y es una herramienta fundamental para que si el productor entiende que es un buen precio poder empezar a tomar coberturas y a posicionarse en el mercado».
Sostuvo que «el productor es un empresario que tiene muy claro su ecuación económica, tiene conocimiento perfecto de qué le conviene y qué no. No solamente es una cuestión económica, hay cuestiones ergonómicas detrás de la siembra del trigo, pero todo eso lo pone en consideración y define finalmente dónde va a invertir su dinero. Esta campaña viene complicada, ya que la cosecha de soja y maíz está atrasada, lo cual imposibilita incluso que los productores puedan empezar a pensar de manera decidida en trigo».
¿Es preocupante que los productores se vuelquen al sorgo y el año que viene falte maíz?
«Todavía es demasiado temprano para poder responder esa pregunta. En las zonas donde la chicharrita ha afectado con mayor intensidad realmente ha sido muy grave y económicamente es un problema para quien lo ha sufrido. Además, afectará las decisiones de siembra de la nueva campaña y la cantidad de sorgo que se siembra es un número reducido respecto al maíz, por ende, no puede reemplazarlo», explicó.
Consideró que «es un partido que se está jugando y se debe hacer un seguimiento para ver cómo continúa».