La reciente clausura de una fiesta UPD ha generado inquietud y debate en la comunidad, y Verónica, madre de uno de los jóvenes presentes en el evento, comparte su testimonio y reflexiones sobre lo ocurrido.

En diálogo con La Vuelta del Perro, Verónica reveló detalles sobre la fiesta y su contexto: "Se suspendió debido a la descompensación de una niña".

 Verónica expresó su preocupación sobre la organización del evento, al que asistieron 859 adolescentes, y la falta de regulación en cuanto al consumo de alcohol: "Los chicos se ven en la obligación de buscar un lugar donde puedan festejar", comentó y destacó la necesidad de contar con espacios habilitados y seguros para este tipo de celebraciones.

Además, la madre relató que, a pesar de haber firmado un contrato y pagado una considerable suma de dinero por la entrada, la seguridad en el lugar era deficiente. "No había nada, solo una mujer cuidando los baños", lamentó Verónica quién describió que hubo ausencia de medidas de seguridad adecuadas.

La entrada del evento fue de 13 mil pesos cada uno. La suma total fue abismal, Verónica explicó que no es solo es una estafa monetaria, sino moral. A pesar, de que hubo multa, la cifra recaudada fue mayor. 

El testimonio de Verónica refleja las preocupaciones de los padres en relación con la seguridad y el consumo de alcohol en eventos de este tipo. A medida que se discuten posibles soluciones y se buscan responsabilidades, queda claro que la protección y el bienestar de los jóvenes deben ser prioritarios en la planificación y organización de futuros eventos.



Informe 16