El Consejo Económico y Social de Río Cuarto dio a conocer un documento firmado por las organizaciones del ente municipal donde se apunta a construir el diálogo para conseguir una sociedad mejor
El documento está firmado por las siguientes instituciones: Pastoral Social de la Iglesia Católica; Pastores Iglesia Evangélica; Universidad Nacional de Río Cuarto; Confederación General del Trabajo; Centro Empresario, Comercial y de Servicios; Central de Trabajadores de la Argentina; Sociedad Rural, Federación Agraria; Colegio de Abogados, Colegio Médico, Foro de Profesionales; Representante del Deporte, Representante de centros Comunitarios; Representante de la Cultura; Vecinales, Representante del Ejecutivo Municipal y Bloques Parlamententarios Locales.
Ante los sucesos acaecidos en Río Cuarto, Córdoba Capital y los hechos que se vienen sucediendo en el orden nacional, nos vemos llamados a realizar una seria y profunda reflexión como un aporte a la construcción de la amistad social entre los cordobeses y argentinos. ¿Qué nos ha pasado? ¿Cómo podemos haber llegado a esta situación? ¿Por qué tanta violencia? La respuesta no es simple y tiene varios niveles.
Partimos de un reclamo justo de la fuerza policial que deriva en un autoacuartelamiento, que a su vez, genera un vacío de seguridad que lleva a los saqueos y violencia por todos conocidos. Nada justifica la violencia y el robo y son actitudes totalmente rechazables. Tampoco se justifica una metodología de reclamo que aun siendo justo, lleve a esta situación de indefensión a toda la población.
Todo ello nos lleva a la necesidad de establecer canales permanentes de diálogo, de escucha y consideración de todos los factores que entran en juego; en especial entre las autoridades del gobierno y el sector que realice los reclamos. Hay que evitar llegar a situaciones como las sucedidas y solucionar los conflictos de modo más racional y pacífico.
Abogamos para que el Estado provincial actuando dentro del marco de las atribuciones establecidas por la Constitución Provincial haga todos los esfuerzos y tome los recaudos necesarios para evitar situaciones como las sucedidas o las que puedan suceder, además, para que haya un diálogo y consideración de parte del Gobierno Nacional a tratar los problemas de nuestra provincia con criterios objetivos y mirada amplia. La falta de entendimiento, a la larga no nos hace bien a nadie.
Del diálogo que podamos construir entre todos y especialmente entre los gobernantes los dirigentes sociales y la propia comunidad, depende la sociedad que les estamos dejando a nuestros hijos.
El diálogo refuerza la gobernabilidad democrática y sin él, la democracia queda vacía. Lo contrario, el enfrentamiento debilita y desmembra a la comunidad.
Pero hay un nivel más profundo que nos tiene que llevar a reflexionar sobre la necesidad urgente de valorar y trabajar denodadamente para restablecer los vínculos humanos y la amistad social. La paz, que es la tranquilidad en el orden, sólo se logra si se camina en la justicia y en la equidad de modo que todos los actores de la sociedad sientan que forman parte de la misma, que tienen mucho que ofrecer y también que recibir. Quien no se siente parte de su comunidad siente la sensación de estar fuera del mundo, y sin cuidado del otro, tampoco hay democracia.
El Estado tiene la responsabilidad de garantizar estos parámetros mínimos de la cohesión social.
El Consejo Económico y Social de Río Cuarto, convoca en esta traumática y dolorosa coyuntura histórica de la Provincia de Córdoba, y parte del país, a reencontrar la paz social, a partir de un diálogo respetuoso, profundo y maduro entre los distintos niveles de gobierno, la dirigencia social y la ciudadanía en general, para afirmar el derecho a la seguridad, y a cada una de las garantías constitucionales que crean las condiciones para la autorrealización de los ciudadanos.
Exhorta también, a la creación de mecanismos jurídicos formales y de sentido práctico que faciliten y garanticen la solución de conflictos, en particular los que pongan en riesgo los servicios esenciales e indelegables de los Estados, como en este caso la seguridad u otros derechos como la Justicia, la salud, la educación, dentro del marco del absoluto respeto del federalismo, columna vertebral que garantiza una República integrada y con fuertes bases constitucionales.
Es la política a través de sus instituciones de gobierno y del respeto de la ley, la que debe hacerse cargo de la relación vital de las personas, sino pierde la comprensión de la vida, del sufrimiento, la angustia, y se disuelve en lo administrativo, los expertos, las encuestas, con consecuencias dolorosas y en algunos casos irreversibles para la comunidad.
No es momento de repartir culpas que agudicen enfrentamientos, pero sí que se asuman responsabilidades fundamentales desde los lugares de decisión en el Estado, delimitando responsabilidades, siendo absolutamente conscientes que esta circunstancia traumática que ha vivido la Provincia de Córdoba y en otros puntos del país, no puede volver a repetirse.
Adherimos al llamado del Papa Francisco a trabajar por una cultura del encuentro que tenga como herramienta insustituible el diálogo, que supone confianza y búsqueda del interés general, dejando de lado los intereses particulares.
Este año estamos cumpliendo 30 años continuados en los que hemos sido capaces de encaminarnos como país a través de la Democracia. Este es un gran bien que debemos trabajar cada día para conservarlo y para no retroceder a horas tristes ya superadas en la Argentina. Los acontecimientos vividos nos dicen que debemos crecer y madurar en la convivencia como ciudadanos, que tenemos que encontrarnos para juntos resolver la deuda social y de justicia que aún tenemos. Este es hoy un gran desafío al cual queremos aportar nuestro grano de arena con todos los sectores de nuestra sociedad y con cada uno de los Cordobeses y en especial los riocuartenses que por estos días hemos sufrido además y por las inclemencias del tiempo situaciones difíciles.