Siete paraísos termales para conectarse con la naturaleza en Brasil, Uruguay y Argentina
- 19/01/2024 19:30 hs
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Se trata de auténticos oasis de bienestar, con piletas naturales que pueden disfrutarse durante todo el año. Aquí, un repaso por algunos de ellos y sus propuestas
Las aguas termales, auténticos oasis de bienestar, han sido durante mucho tiempo reconocidas por sus propiedades relajantes. Soñar con sumergirse en estas piletas naturales de agua caliente no está limitado a una época específica del año; es una experiencia que puede disfrutarse en cualquier momento, incluso en pleno verano.
Más allá de las estaciones, estas opciones no son simplemente baños de naturaleza; son destinos que ofrecen una conexión única entre cuerpo y entorno, con propuestas que van desde la serenidad hasta la emoción, adaptándose a los gustos de cada viajero.
Aquí nos aventuramos a explorar el triángulo formado por Argentina, Uruguay y Brasil, revelando siete lugares que rompen con los destinos convencionales de la temporada y nos sumergen en la serenidad de apartarse del bullicio urbano, rodeados de la majestuosidad de la naturaleza. Cada uno de estos destinos está intrínsecamente ligado a la oferta termal, proporcionando no solo una escapada rejuvenecedora, sino también la oportunidad de contemplar paisajes únicos que enamoran los sentidos.
Siete paraísos termales en Brasil, Uruguay y Argentina
Dos parques de termas en Brasil
En el extremo oeste del estado de Santa Catarina, el Parque Termas São João se erige como un refugio familiar, con atracciones para todas las edades. La infraestructura del parque es diversa y abarca desde piscinas cubiertas y al aire libre, alojamientos de lujo, restaurantes y deportes de aventura; todo dentro del predio. Así las cosas, este destino, en São João do Oeste, tiene un ambiente ideal para disfrutar en cualquier época del año.
Mientras tanto, en otra joya brasileña, el parque Termas Ilha Redonda, ubicado en la localidad de Palmitos, atrae por su exuberancia natural que, por supuesto, incluye aguas termales Rodeado de la belleza del río Uruguay, este balneario invita al descanso y la conexión con la naturaleza. Con aguas a 37,7°C, ofrece beneficios para la salud humana, convirtiéndolo en un paraíso donde la relajación se fusiona con la majestuosidad del entorno. Aquí, las familias pueden alojarse en hoteles o, si eligen conectarse de lleno con la naturaleza, hay una variada oferta de campings.
Un destino termal en Uruguay
Cruzando la frontera rumbo a tierras charrúas, en Termas del Arapey, Uruguay, se devela un tesoro: con temperaturas que rondan los 41°C, las aguas de este lugar son ideales para desconectarse de la rutina y relajarse durante la temporada estival.
“En verano, las aguas termales no tienen tanta temperatura como para que se sientan molestas, sino que son temperaturas agradables para disfrutar, aún teniendo 35°c o 36°C”, explicó a Infobae John Iriondo, gerente general de Altos del Arapey Club de Golf & Hotel Termal, uno de los exclusivos alojamientos de Termas del Arapey. Con spa y áreas verdes para actividades al aire libre, entre otras propuestas, este all inclusive invita a vivir la experiencia más allá de sus cinco piscinas de agua termal.
Termas en Argentina
En Argentina, las opciones para vacacionar y relajarse en aguas termales abundan. Precisamente, no muy lejos de las fronteras con Uruguay y Brasil, en la provincia de Entre Ríos, hay propuestas interesantes para quienes buscan desconectarse del ritmo de la ciudad.
A orillas del lago Salto Grande, el Parque Termal de Federación se presenta como un núcleo de tranquilidad y bienestar. El alma de este paraíso acuático emana de aguas hipertermales que brotan a una constante temperatura de 42°C desde una profundidad de 1.268 metros. Se trata de una especie de bálsamo para comenzar el 2024 con energías y vitalidad. Dentro de este predio se encuentran un parque acuático, ideal para los más chicos, entre otras atracciones, que complementa la experiencia con circuitos hídricos e instalaciones diseñadas para promover el placer y el bienestar.
En tanto, a pocas horas de Buenos Aires, las Termas de Guaychú, a 8 kilómetros del centro de la ciudad de Gualeguaychú, cuentan con piscinas dotadas con aguas provenientes de acuíferos de entre 700 y 1000 metros de profundidad, con un poder relajante que se despierta a una agradable temperatura de 36°C.
Este complejo termal, también apto para los más pequeños, tiene parque acuático, canchas de fútbol y vóley, como iniciativas que se suman a la diversión. Los fines de semana, el spa deleita con tratamientos de belleza y relajación, mientras que las modernas instalaciones ofrecen una experiencia integral. Con restaurantes, proveeduría, bungalows y más, las Termas de Guaychú son el destino perfecto para escapar del bullicio citadino y sumergirse en un oasis termal.
En el corazón de la provincia, más allá de las aguas del río, se revela el encanto de Villa Elisa y su complejo termal que cuenta con bungalows y hoteles. Con piscinas de distintas temperaturas y usos, desde hidrojets hasta recreativas para los pequeños, este lugar es un deleite para todos los gustos y edades. El complejo de 41 hectáreas tiene 10 piscinas que abarcan diversos usos y temperaturas.
Este extenso espacio no solo ofrece una amplia gama de servicios, que incluyen alojamiento, opciones gastronómicas, spa, deportes y actividades recreativas, sino que también cuenta con generosos espacios verdes provistos de sombra natural y un extenso lago artificial de 4 hectáreas y ambiciosos proyectos futuros. Las aguas del complejo Termas de Villa Elisa, brotando a 40°C desde 1036 metros de profundidad, proponen una experiencia revitalizante.
Retornando a las orillas del río Uruguay, en la ciudad vecina de Colón se encuentra Termas Colón, un cautivador complejo inmerso en un entorno singular de inigualables riquezas naturales, que logra una armoniosa fusión entre el agua, la exuberante flora, la diversidad de fauna y un paisaje pintoresco. Este escenario da lugar a un microclima especial, desatando en cada visitante una profunda sensación de bienestar y relajación. Un refugio donde la sinfonía de la naturaleza se convierte en la melodía perfecta para escapar del estrés cotidiano y sumergirse en una experiencia rejuvenecedora.