El robot Curiosity encontró pruebas de un antiguo lago en Marte que podría haber sustentado la vida por períodos largos hace millones de años, informó la NASA. "Honestamente, el sitio se parece mucho a la Tierra", comentó el científico principal de la misión Curiosity, John Grotzinger, del Instituto de Tecnología de California.
El robot Curiosity encontró pruebas de un antiguo lago en Marte que podría haber sustentado la vida por períodos largos hace millones de años, informó hoy la agencia espacial estadounidense NASA.
Por su parte, otro equipo de científicos de la NASA explicó que, según las observaciones y mediciones hechas por Curiosity, el riesgo de exposición a la radiación cósmica no debería ser un obstáculo para misiones humanas tripuladas a Marte.
Los instrumentos de Curiosity -un robot que llegó a la superficie marciana el 6 de agosto de 2012- han encontrado información que permite calcular que ese lago poco profundo, con agua dulce, existió hace unos 3,7 millones de años.
Los científicos creen que esto indica que pudo existir ambientes habitables en Marte mucho antes de lo pensado hasta ahora.
Un equipo de investigadores del Laboratorio de Ciencia de Marte, de la NASA y el Colegio Imperial, de Londres, ha analizado una muestra de rocas sedimentarias en un sitio llamado Yellowknife Bay, en el cráter Gale donde se posó el robot, cerca del ecuador de Marte.
Esas piedras de lodo han revelado que el cráter Gale, una cuenca de 150 kilómetros de diámetro con una montaña en su centro, albergó al menos un lago hace unos 3,7 millones de años. Los científicos creen que el lago puede haber existido por decenas o cientos de miles de años.
El análisis de los científicos mostró que el lago era calmado y probablemente contenía agua dulce con elementos biológicos tales como carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno y azufre.
Una cuenca acuática de tales características proporcionaría las condiciones adecuadas para que prosperaran formas de vida microbiana simple, como los llamados quimiolitoautótrofos.
En la Tierra los quimiolitoautótrofos se encuentran comúnmente en cuevas y en torno a los boquetes hidrotermales. Esos microbios descomponen rocas y minerales para obtener su energía.
Las piedras de lodo en general se forman en condiciones de calma por la sedimentación de granos muy finos, capa sobre capa, en el agua quieta.