El economista Flavio Bucchieri habló en Micrófono Abierto sobre un análisis económico y político también sobre el impacto que puede generar estas medidas anunciadas ayer por el Gobierno Nacional.

 Sostuvo que muestra mucha improvisación del gobierno de Javier Milei y que no hay un plan económico. 

“Esto no es un plan de estabilización todavía”, dijo el economista. “Es un conjunto de medidas para cerrar el déficit fiscal, como lo anunció el ministro y esta mañana el vocero presidente”.

 
“Lo único que esto trata de buscar es precisamente un puente, dar previsibilidad en que estas medidas van a conducir a una reducción fuerte del déficit fiscal y de esa manera, luego de ello, con la liquidación de la de soja que comienza a partir de fines de marzo y se consolida en abril y mayo, va a conducir a una a una recuperación en las reservas internacionales y ahí podríamos estar pensando que hay una segunda etapa en lo que va a ser la mejora de la situación económica”, explicó y aseguró que “esto es una cuestión estrictamente fiscal”.
 

Bucchieri también se refirió a la situación social que puede generar el costo de las medidas en los sectores más desprotegidos: “La gran pregunta es si la sociedad va a tomar esto, porque quien lo va a pagar no son los que inicialmente el gobierno había anunciado en su plataforma de gobierno. Esto está mostrando la debilidad política del presidente y está recurriendo a asignarle la corrección en aquellos sectores en donde el gobierno cree que tiene margen para poder intervenir sin que haya un rechazo significativo. Lo tiene que hacer ahora, no tenía más remedio, es insuficiente, pero habrá que esperar a que en abril y marzo cuando se produzca la transición ahí ver un plan de estabilización mucho más concreto”.

 
“Lo que el gobierno no está diciendo es que lo que es "Vox Populi", esto es la liberación de los precios, la inflación que ha acontecido, la eliminación de la Secretaría de Comercio, el aumento de tarifas, esto va a generar un aumento de la inflación muy importante. El gobierno también lo está anunciando y seguramente puede llegar a ser más alta que la que el gobierno está considerando. Esto va a implicar una caída en el salario real de muchos sectores. Traerá como consecuencia agravar la conflictividad social y el mal humor”, sentenció.
 
 
Además, comentó que el gobierno está revisando de qué manera puede haber una reposición en la eliminación del impuesto a las ganancias, pero que “todavía hay un largo camino por recorrer, el gobierno va a meter el cuchillo en aquellos sectores que van a tener bajo nivel de representatividad política. Esos sectores, que tienen representatividad política, se van a defender, poner palos en la rueda y no van a negociar, y van a generar que las reformas estructurales, que son las que verdaderamente le interesan al presidente, y que se anunciarían más adelante, no se van a poder llevar”.

 
“No alcanza por haber ganado, ahora hay que gobernar, y gobernar implica decirle quién va a pagar el peso de los latos rotos”, alegó el economista.

 
Por otra parte, planteó que hay una incoherencia discursiva ya que, por un lado, se anunció que se iban a romper relaciones económicas con China, y ayer el presidente tuvo que mandarle una carta casi de rodillas pidiéndole al presidente Xi Jinping que autorice el segundo tramo del swap con China. Entonces, me parece muy desprolijo”, sentenció.
 
 
  “Los que ayer festejaban son los que pensaban que estaban al margen del ajuste. Esto recién empieza y para poder lograr gobernabilidad, hay que repartir el ajuste”, opinó.



 

Informe16

Foto: Iprofesional