La fiscal platense Betina Lacki pidió convertir la aprehensión de Julio “Chocolate’ Rigau en prisión preventiva. En realidad se trata de una formalidad que exige el Código Procesal de la Provincia y se refiere a la primera detención del puntero, el 9 de septiembre pasado.
Rigau fue liberado y detenido nuevamente. La decisión quedó en manos del juez Guillermo Atencio, que también deberá resolver los pedidos de detención del concejal platense Facundo Albini y de su padre, Claudio Albini, que durante años se desempeñó como subjefe en la Dirección de Personal de la Cámara de Diputados bonaerense.
Según pudo saber Infobae, el juez tiene tiempo para resolver el pedido de prisión preventiva hasta el martes próximo, luego de las elecciones presidencial y del feriado. No contestará antes, salvo que se expida la Cámara de Apelaciones de La Plata, que deberá resolver un pedido de nulidad presentado por los abogados de Rigau.
El juez Atencio ya rechazó un pedido de eximición de prisión presentado por la abogada de Albini padre e hijo. En esa resolución, el magistrado detalló que hasta ahora la suma total del fraude sería de 800 millones de pesos. “Tengo para mí que la decisión respecto del otorgamiento de este beneficio, debe supeditarse en el caso a valoración de la modalidad del hecho. En efecto, la extensión del daño causado, y las características de la conducta aquí investigada, resultan pautas significativas para vislumbrar que, de recaer sentencia condenatoria, habrá de ser de cumplimiento efectivo”, dijo.
Ahora debe decidir si ordena su detención.
Una de las pruebas en contra de los Albini surge de la pericia del teléfono de Rigau. Según un informe preliminar de ese aparato, “Chocolate” tenía mensajes con Facundo Albini, identificado como “Facu”, y decenas de referencias a su padre, Claudio Albini.
El informe preliminar, al que tuvo acceso Infobae, muestra una conversación del 27 de agosto pasado, dos semanas antes de la detención, donde “Facu” le envía varios mensajes reclamándole que si Rigau no quiere trabajar más con él que se lo diga y quedan en buenas relaciones.
Ante la falta de respuesta, Albini le habla de dinero: “Te llevas 200 por mes hace 3 años y, cuando te necesito, no estás. Siento que me estás faltando el respeto a mí y a la amistad que tenemos y no quiero terminar mal con vos”.
Hay más. El 5 de septiembre, apenas cuatro días antes de su detención, Rigau le mandó a Albini una foto de un comprobante de movimientos bancarios. Ese mismo comprobante estaba entre los tickets secuestrados a “Chocolate” el día de su detención.
En el dictamen que le amplía la acusación a Rigau, que ahora está imputado de estafas reiteradas y asociación ilícita, la fiscal también destaca varias conversaciones entre Rigau y otras personas donde se menciona explícitamente a Claudio Albini.
El 28 de julio, el puntero le manda un mensaje de voz a una mujer agendada como “Carmen” en el que habla de “rendir” parte de la recaudación: “Bueno, bueno, si ayer nos dijeron que bueno, que... en el horario de visita, once y media, entre once y media y doce ehh... la... tenía el alta, yo tengo que ir a rendir, ahora estoy por llamar a Claudio tratar de rendir lo más temprano posible y llegar por lo menos a las doce”.
El 18 de agosto, en una conversación con un hombre agendado como “Chispa”, Rigau vuelve a mencionar a Albini. “Negro, negro, negro, negro, negro, escuchame una cosa, ehhh... que quedaste con el gordo porqueee Claudio hoy me preguntó si, cómo venía... cómo venía eso y para el lunes, tengo que tener finiquitado ese tema”.
Albini no solo es aludido en los chats sino que su firma, como subdirector de Personal de la Cámara de Diputados, aparece en varios partes de recepción de las tarjetas de débito.
Infobae