El Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y la Cámara de Exportadores de la República Argentina (CERA) presentaron esta semana un documento sobre “Lineamientos básicos para una Política de Estado exportadora” con el propósito de que el nuevo gobierno nacional que asuma el próximo 10 de diciembre lo tenga como guía.

Si bien la entidad de la industria tiene un rol de proponer policías públicas y ha presentado unas 40 medidas con caminos para su cumplimiento ahora plantean, junto con los exportadores, la necesidad de una política nacional exportadora. “Ese sector puede contribuir a que Argentina genere 200.000 millones de dólares en 10 años”, dijo José Martins vocero del Consejo Agroindustrial Argentino.

La entidad viene planteando levantar las restricciones a la exportación, bajar la carga tributaria, consideran las retenciones como “un impuesto perverso”, por eso han propuesta una baja gradual. De implementar medidas de este tipo “la agroindustria podría generar 100.000 millones de dólares y generar aproximadamente 800.000 puestos de trabajo”.

Respecto del lanzamiento conjunto con CERA, Martins dijo que “le mostramos a la opinión pública que si los argentinos no ponemos de acuerdo hay oportunidades”.

Fue algo que abarca toda la cadena agrobioalimentaria industrial…

Exactamente. Nosotros siempre decimos que hay que mirar en un todo. Campo y productor agropecuario es la base, la pirámide fundamental de la cadena agroindustrial, pero también por los costados, hay otras actividades. Hoy el Consejo Agroindustrial está nucleando más de 70 entidades, es federal. Trabajar en conjunto, mostrarle a la política que se puede hacer y dejar de mirarnos el ombligo y pensar que nosotros somos los pobres o los siempre lastimados.

¿Puede haber un retorno de las entidades que se fueron del Consejo Agroindustrial para que se sumen a esto?

Ese es un viejo anhelo. Esta es una entidad que está abierta y por eso hacía mención que las propuestas que hacemos, en el Consejo no participa en política, no participa en gremialismo, lo único que se ocupa es de generar propuestas de políticas públicas, con lo cual todo lo que escribimos y hacemos está abierto a ser modificado, mejorado y nuestra intención es ser la primera semilla que genere que la cadena agroindustrial esté húmeda. No podemos tener 150 entidades que trabajan cada una por su lado, porque esto es lo que nos ha llevado a esta situación, que los gobiernos toman de a uno, le sacan a uno, le dan al otro, y lo que nosotros estamos proponiendo es a toda la cadena.

¿Por qué a 10 años?

Porque nosotros no queremos hablar con este gobierno, queremos hablar con los próximos tres o cuatro gobiernos, lo que queremos es un compromiso y por eso en la propuesta una de las primeras cosas que decimos es, el 11 de diciembre, gane quien gane, tiene que mandar un paquete de leyes al Congreso y una de ellas tiene que decir que se levantan todas las restricciones a la exportación y que ningún funcionario puede mañana poner una restricción, tiene que ser ley del Congreso.

¿Qué es lo que esperan del CAA?

Que sea un conglomerado de entidades que se siente a discutir con el poder político. Evidentemente la política en Argentina no ha sabido, o no ha querido, interpretar los beneficios de la agroindustria, sería bueno que los nuevos gobernantes convoquen a los que saben de la agroindustria para tener las medidas que corresponden.

¿Cómo ves la situación del trigo?

Es preocupante, no solo por el volumen de la cosecha, sino por múltiples factores, primero porque la seca sigue afectando una zona geográfica importante, esa zona geográfica lamentablemente no va a tener el trigo primicia, que siempre estuvo en movimiento, con lo cual por un lado afecta el bolsillo de ese productor, que otra vez no va a tener un ingreso temprano, afecta también a la tesorería del Estado, porque no va a tener ingresos de divisas en noviembre o diciembre, con lo cual es lamentable esto.