El actual mandatario dijo que a partir de mañana iniciará contactos con los líderes de otras fuerzas políticas en busca del apoyo necesario para lograr su investidura en una votación en el Congreso de los Diputados.
Luego del fracaso del derechista Partido Popular (PP), Felipe VI, rey de España, encargó al socialista Pedro Sánchez que inicie las gestiones para formar gobierno, por lo que el actual mandatario comenzará desde mañana a tomar contactos con los líderes de otras fuerzas políticas en busca del apoyo necesario para lograr su investidura en una votación en el Congreso de los Diputados.
Así lo confirmó la diputada socialista, Francina Armengol, al señalar que la propuesta a Sánchez como candidato a la investidura se dio al término de una ronda de consultas con partidos que obtuvieron bancas en las elecciones generales de julio.
Al respecto, el propio Sánchez afirmó que recibía con "ilusión" el encargo. "Quiero decirles que lo hago con ilusión. Con la ilusión de saber todo lo que España puede avanzar en estos cuatro años con un Gobierno progreista", dijo el líder del partido PSOE en declaraciones en el Palacio de la Moncloa, la sede del Gobierno español, en Madrid.
El rey recibió hoy en el Palacio de la Zarzuela a Sánchez y a Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, y cerró la segunda ronda de consultas para proponer un nuevo candidato a la Presidencia del Gobierno.
Núñez Feijoó, que no logró el cometido en primer término, aseguró que Sánchez contaba ahora "con menos apoyos de los que contaba hace un mes", según informa la agencia de noticias española Europa Press.
"Nos esperan semanas de muchas mentiras", agregó, en referencia a las negociaciones que emprenderá de Sánchez, que está en el poder desde 2018 y necesita el respaldo de partidos regionales independentistas para ser investido nuevamente.
El PP había ganado en las elecciones, pero por un margen ajustado, en contra de lo que se especulaba en la previa, en la que lo daban como un amplio ganador, lo que le hubiera permitido desplazar al socialismo de la primera magistratura, cosa que finalmente no sucedió ante la gran elección del PSOE liderado por Sánchez.
El mes pasado, el rey había encargado a Núñez Feijóo formar Gobierno, pero el líder popular se quedó a tres votos de lograrlo. Al igual que el líder del PP, Sánchez podrá hacer dos intentos.
En una primera votación, deberá alcanzar la mayoría absoluta de 176 bancas del Congreso de los Diputados para poder volver a ser investido presidente del Gobierno.
Si no lo consiguiera, 48 horas horas después podrá ser investido con una mayoría simple, es decir con más votos positivos que negativos. Sánchez ya tiene asegurado el respaldo de los 121 diputados del PSOE y ahora busca agregar el de la coalición de izquierda Sumar, los partidos catalanes ERC y JxC, los vascos EH Bildu, PNV, el gallego BNG y el canario Coalición Canaria. Con esos apoyos, llegaría a 179 bancas, tres más que la mayoría absoluta.