Marcelo Rojo, director médico de Clínica del Sud, dialogó con LV16 acerca del contexto de crisis y cuánto  afecta al área de la salud.

“El ritmo de la inflación es muy distinto al ritmo de aumento de los financiadores, entonces es muy difícil en este contexto no perder. Nosotros trabajamos con materiales importados, todo lo que es videoendoscopios, clip para cirugía endoscópica, pinza, material quirúrgico, medicamentos, medicamentos oncológicos y obviamente tener un presupuesto asignado no se puede hacer desde hace años”. 

Rojo expresó con preocupación que “la situación actual es totalmente desconcertante, porque nosotros dependemos mucho de materiales importados, no es que no valoremos lo nacional, el problema es que lo nacional tiene también componentes importados”, agregó que la devaluación fue trasladada a los precios y todo lo que se tenía programado cambia “porque indudablemente no podemos dejar de crecer, no podemos dejar de pensar en una medicina del futuro, pero al mismo tiempo nos vemos con las manos atadas”.

El Director de la Clínica del Sud explicó mucho de lo que necesitan se vende a precio dólar blue y por ende consideró que hay situaciones que se volverán más dramáticas como en otros contextos de crisis.

También comentó que en esta situación muchas de las personas que trabajan en la clínica llegan con una carga emocional de la casa que es difícil de dejar afuera de la entidad. 

Rojo agregó que “los financiadores no ajustan los precios al mismo ritmo. Las paritarias tenemos que cumplirlas, no podemos bajar de calidad del servicio que brindamos, no podemos dejar de pensar en nuevas tecnologías, nuevos servicios, nuevas inversiones, pero no hay créditos, no hay aumento por parte de los financiadores, o los aumentos no impactan directamente en el costo de las cosas”.

Además el referente de esta institución emblemática de salud expresó que hay otra cuestión que es muy problemática, y es que no hay medicina en todo el sur de la provincia de Córdoba.

“No hay medicina en el sentido de que se han perdido muchísimas clínicas, no hay contención, no hay una buena política de atención primaria, no hay poder de resolución de patologías que antes se solucionaban, y entonces estamos hablando de una población de más de 600 mil habitantes que llega a Río Cuarto, y que indudablemente el sector privado y público la tiene que contener”.

Rojo explicó que no hay médicos en los pueblos porque éstos no quieren ir y eso también afecta las entidades privadas y las entidades de salud donde la calidad se debe seguir garantizando, “porque el paciente pone la vida de él en manos nuestras”.


Informe16