El Ing. Agrónomo Pablo Méndez de Casafe, la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes, realizó una publicación en Twitter con información relevante sobre cómo se comportan los suelos de ensayo.
“El 7 de julio fue el Día Internacional de la Conservación del Suelo, yo estaba preparando una nota para Casafe, y encontré una publicación de Estados Unidos que me pareció muy interesante”, contó a Valor Agregado y explicó que primero hizo la traducción y luego lo convirtió en un hilo de Twitter.
En la red social explicó cómo se comporta un suelo que por años ha sido trabajado de manera convencional y otro sometido a labores conservacionistas, con siembra directa, cultivo de cobertura, etc. “Realmente lo impactante de eso es cómo se comportaban las muestras de esos suelos, y por eso el tuit impactó muchísimo”.
Destacaste mucho las infiltraciones de agua…
Totalmente porque de lo que se hablaba en definitiva era de dos puntos importantes. Uno era la estructura del suelo, y el otro punto, la vida en el suelo. Cómo se mantiene la estructura del suelo. La estructura del suelo es como el esqueleto, es como los huesos en un cuerpo, donde luego ahí se cuelgan diferentes organismos y otras estructuras. La estructura del suelo es justamente eso, es cuando vos tomas un puñado de suelo, es como lo ves en los terrones.
Además el profesional agregó que «el tipo de labranza convencional donde roturábamos el suelo para dejar la cama de siembra, donde vamos a colocar la semilla, deja un suelo muy fino, para que haya un contacto íntimo con la semilla del suelo. Sucede que lo que estábamos generando también, de esa manera, es pérdida de nutrientes por infiltración, posibles compactaciones, porque si llueve, esa pelmaza se seca y se compacta, pérdida de suelo por erosión hídrica o eólica, o sea, por viento, por agua. Así las proteínas y nutrientes se van con la pérdida del suelo, y el suelo en definitiva, es un alimento muy importante en la producción de alimentos».