Según una investigación reciente, en el lado oscuro de la web (dark web) circula una base con más de 6 millones de tarjetas de crédito robadas, de las cuales 17 mil pertenecen a argentinos.

En los últimos días se acrecentaron las denuncias de robo de datos y compras no realizadas por el titular de las tarjetas y comenzó a circular la idea que pasando a tu lado con aparatología desarrollada al respecto y la fuente de wifi abierta te roban lo que contiene el chip.

La especialista Ingeniera en Sistemas Gilda Agustina Amsler, con amplios estudios en investigaciones digitales y ciberinteligencia explicó en diálogo con Mabel Sánchez que esta modalidad es más difícil pero no imposible. Aclaró que es más habitual robar datos ingresando a la misma red en la que uno está, lo que permite la vulnerabilidad para quienes están conectados. Ejemplo en un bar, hotel, etc.

Además, Amsler, que se desempeña en el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Santa Fe en Rosario en el área de análisis, detalló que para acceder a aplicaciones de Inteligencia Artificial como el ChatGPT, éstas solicitan "una serie de datos registrales y hay personas que se dedican a usar estas bases de datos con fines delictuales. Es decir, se transformó en una app que tenia fines educativos a una app que almacena datos personales y sensibles de uno y se utilizan para distintos tipos de delitos".

El diario El cronista comercial dio a conocer la decisión que cambiará el uso de las tarjetas de débito y crédito en 2024 y comienza con Mastercard. El nuevo objetivo en la búsqueda de otorgar mayor seguridad en el uso es eliminar las bandas magnéticas por seguridad. Llevarán un chip electrónico y la huella dactilar del usuario. De esta forma comenzará a implementarse la tecnología biométrica, buscando mayor seguridad para los usuarios. En este sentido, la tarjeta sólo podrá usarse o efectuarse el pago al utilizar la huella del usuario titular de la tarjeta.