El Banco de Alimentos nació en Estados Unidos en 1960, con el objetivo de que los supermercados no tengan que decomisar alimentos porque muchas a veces a pesar de estar en condiciones para el consumo no llegan a hacer todo el ciclo de la cadena comercial. De esta manera, donan la mercadería a la organización y esta la distribuye a una red de merenderos que la retiran antes de la fecha de vencimiento.
El modelo se hizo muy exitoso y hoy es una ONG presente en más de 50 países con 250 bancos de alimentos en todo el mundo.
Río Cuarto tiene uno de estos, con sede en la Sociedad Rural de Río Cuarto desde hace 14 años.
La Tarde del Limón dialogó con Andrea Chiesa, Lic en Comunicación y Magíster en Administración, directora de la Fundación Banco de Alimentos.
Dijo que en los inicios el Banco de Alimentos trabajaba solo con organizaciones sociales, pero como se fue complicando tanto la situación económica también están aceptando familias.
“Hacemos un seguimiento de ese alimento para que no se comercialice. También medimos peso y talla a quienes lo reciben para medir el impacto de la acción que hacemos en las organizaciones”, indicó.
En el 2022 el Banco de Alimentos de Río Cuarto entregó 1000 kilos por mes y por ende unos 120.000 kilos en el año lo cual impactó en aproximadamente 2.000 personas por mes.
Quienes deseen asociarse deben abonar un monto mensual para la compra de alimentos que no se producen en la zona de Río Cuarto ni tampoco son donados por las industrias.
Para colaborar deben contactarse a las redes sociales @bancodealimentosriocuarto
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