El hecho de que el gobierno no reconozca los derechos de las trabajadoras del sexo les ha permitido sufrir horribles condiciones de trabajo. Las trabajadoras se enfrentan a menudo a detenciones, deportaciones y otras consecuencias, pero siguen luchando por sus derechos.
Estas trabajadoras del sexo en Argentina han formado colectivos para defender sus derechos humanos y han creado programas educativos para otras mujeres que trabajan en el sector. Los colectivos trabajan para educar a las jóvenes sobre los riesgos de entrar en la prostitución y han creado centros para que estudien temas relacionados con la salud sexual y la prevención de la violencia.
Desde hace 50 años, las trabajadoras luchan por mejores derechos, mejores servicios sanitarios y una vida mejor
En 1968, organizaron la primera Asociación de Trabajadoras Sexuales de Argentina. Esta organización se formó con el objetivo de mejorar las condiciones de trabajo y luchar contra la discriminación en la sociedad en general.
Además de ser un grupo de defensa que trabaja en favor de los derechos de las prostitutas en Argentina, también proporciona asistencia jurídica si alguien es detenido o agredido por agentes de policía u otros ciudadanos que desaprueban su profesión.
El hecho de que el gobierno no reconozca los derechos de las trabajadoras del sexo les ha permitido sufrir condiciones de trabajo horribles
La ley no protege a las trabajadoras sexuales de la violencia ni de los abusos. A menudo son detenidas bajo cargos falsos por agentes de policía que exigen favores sexuales a cambio de librarse de la detención o incluso como parte de una campaña general contra la prostitución.
Incluso cuando no son detenidas, los clientes pueden mostrarse agresivos con las prostitutas porque saben que no habrá consecuencias si algo sale mal, y a veces las cosas salen mal: Muchas mujeres han sido violadas mientras trabajaban como prostitutas, pero pocos casos se han denunciado porque temen ser procesadas si denuncian lo sucedido.
Las trabajadoras se enfrentan a menudo a detención, deportación y otras consecuencias
Las trabajadoras se enfrentan a menudo a detenciones, deportaciones y otras consecuencias.
Las trabajadoras del sexo suelen ser criminalizadas, detenidas y deportadas por la policía. También son procesadas por delitos relacionados con la prostitución en los tribunales argentinos.
Además de enfrentarse diariamente a estos riesgos, las trabajadoras del sexo tienen escaso acceso a los servicios de salud o a la protección jurídica debido a su ocupación.
Han formado colectivos para defender sus derechos humanos
En Argentina, las trabajadoras del sexo han formado colectivos para defender sus derechos humanos y han creado programas educativos para otras mujeres que trabajan en el sector. Estos programas pretenden ayudar a las mujeres a comprender los riesgos de entrar en la prostitución, para que puedan tomar decisiones informadas sobre su futuro.
Conclusión
Las trabajadoras del sexo de Argentina, y no solo en este país, esta es una lucha que se expande a casi toda Latinoamérica por parte de mujeres escorts Mexicanas y prepagos en Colombia las cuales han guerreado mucho por sus derechos. Se han enfrentado a abusos por parte de clientes y policías, pero siguen educándose a sí mismas y a los demás sobre los riesgos asociados al ejercicio de la prostitución y sobre cómo protegerse de los daños.
Sus esfuerzos han ayudado a miles de mujeres a encontrar entornos de trabajo más seguros y a salir de la pobreza mediante la educación.