La obra esperó 90 años y esta semana se vió cómo empezaron a trabajar en lo más alto del Palacio Mójica para la colocación del reloj de la Municipalidad. Desde La mañana del Limón hablamos con el relojero Guillermo del Valle, quien tiene la fábrica de relojes monumentales, la única que ha quedado en Sudamérica. 

“Andamos siempre mirando todos los edificios a ver dónde podemos poner un reloj y dónde no. Y ahora estamos en este proyecto. Un reloj en el que creo que es el más importante palacio municipal, en tamaño y jerarquía, de lla provincia y unos de los más importantes del país”, expresó Guillermo. Detalló que históricamente los grandes edificios tenían su forma de coronar la obra y era con un reloj. 

Guillermo del Valle aseguró: “Soy simplemente relojero y amante de relojes”. El profesional en la materia ha realizado los relojes en varios puntos del país, incluso en la Casa Rosada. En esta oportunidad tiene la responsabilidad de hacer el que estará en el Palacio de Mójica. 

“Es un reloj bastante simple, de cristal, policarbonato de 10 milímetros. Con agujas importantes. Se va a transformar en una especie de faro en la ciudad. Tiene 1,72 metros de diámetro, el de la Casa Rosada tiene 1,12. Cuenta con protección UV. Los romanos están calados uno por uno en placas de acero de 6,5 mm de espesor. Las agujas son de aluminio, esmaltadas en negro. La máquina es fabricada por nosotros. En si interior tiene 8 lámparas led, va iluminado”, detalló el relojero. 

Cabe mencionar que los relojes que elabora Del Valle cuentan con una tecnología de GPS que permite que la hora sea exacta. “Estamos más fabricando nuevos que arreglando viejos”, aseguró Guillermo. 

Por último Guillermo del Valle contó: “Mi abuelo, Antonio del Valle, fue intendente en Río Cuarto, en 1890. Somos una familia de la ciudad”. Una raíz que marca todavía más la responsabilidad y el placer de fabricar el reloj que estará en el emblemático edificio municipal. 

Fotos: Municipalidad de Río Cuarto

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