La Argentina volvió a ocupar en agosto el segundo lugar en el ranking de inflación de América latina, liderado por Venezuela. El miércoles próximo el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundirá la suba de precios del mes pasado, que, según las consultoras, rondó entre el 6,5% y el 7%, luego del 7,4% de julio. Con ese resultado, desde enero habría llegado al 55% y en los últimos 12 meses al 76 por ciento; para este año, las consultoras elevaron su pronóstico al 95%, según el relevamiento de expectativas del mercado (REM) que difunde el Banco Central; los analistas que más acertaron en el pasado estimaron que llegará al 99,4 por ciento.
Camilo Tiscornia informó que el relevamiento de precios minoristas de C&T para GBA “presentó un incremento mensual de 6,7% en agosto, la segunda variación más elevada del año luego de la de julio (7,6%). De esta forma, la variación de 12 meses trepó a 75,9%, ritmo comparable al de enero de 1992″. En particular, contó que “Transporte y comunicaciones fue el rubro de mayor alza de la mano del ajuste de 40% en el transporte público. Sobre el fin de mes se destacó el aumento de los combustibles”.
Además, precisó que “Indumentaria volvió a subir significativamente, como en julio, a pesar de no ser un mes estacionalmente fuerte”. En bienes y servicios varios “pesaron el incremento de los cigarrillos que se dio a fines de julio y el notable salto de los artículos de tocador.
Por otra parte, “Alimentos y bebidas creció 7,5%, con aumentos generalizados en sus componentes, aunque debe destacarse el alza de frutas y verduras”. En el sector de la salud “fue determinante el incremento de 11% en las prepagas” y en equipamiento y mantenimiento del hogar “hubo influencia del recientemente decretado ajuste en el sueldo de las empleadas domésticas”. Además, “en vivienda el aumento de sueldo para los encargados de edificio jugó un papel importante”. La suba de los alimentos por encima del índice general anticipa un empeoramiento en las condiciones de pobreza e indigencia, tal como prevén varios expertos para el segundo semestre del año.
En tanto, el IPC GBA de Ecolatina subió 6,7% mensual en agosto, desacelerándose 0,8 puntos porcentuales respecto al registro de julio. “No obstante, la comparación interanual se aceleró y alcanzó 75,9% interanual, representando la cifra más alta desde enero de 1992 (76,0%). A su vez, acumuló 55% los primeros ocho meses del año”.
El resto del año
“Para septiembre, sumado al elevado arrastre que dejó la aceleración de la segunda parte de agosto (el IPC Ecolatina pasó de subir 6,2% en la primera quincena a 7,2% en la segunda) y a un sostenido crawling peg, impactarán puntualmente los aumentos en electricidad y gas, el aumento en la tarifa de subte (40%) y de taxis (30%); y los aumentos a empleadas domésticas y en los colegios de la Provincia de Buenos Aires. Así, la suba del índice de inflación se ubicaría cerca del 6% (82% interanual). De esta manera, los precios acumularían una suba de 65% en los primeros tres trimestres del año”.
En septiembre se suman a la sostenida suba de los alimentos los aumentos de tarifas y la aceleración del ritmo de devaluación (EFE)
Para el resto del año, “la reapertura de paritarias, un deslizamiento cambiario consolidado en niveles superiores a los meses pasados y los efectos de primera y segunda ronda que tienen los ajustes en tarifas y combustibles se combinarán para mantener a la inflación por encima del 5% mensual, frente a la falta de un ancla robusta para coordinar expectativas a la baja. Aun estimando esta leve desaceleración en los próximos meses, proyectamos que la inflación cerrará el 2022 con un piso del 92 por ciento”.
La reapertura de paritarias, un deslizamiento cambiario y los efectos de los ajustes en tarifas y combustibles se combinarán para mantener a la inflación por encima del 5% mensual (Ecolatina)
En tanto, ECO GO afirma que su relevamiento de precios se ubicó en el 6,9% el mes pasado y que llegaría al 6,3% este mes; además, proyectó que terminará en el 99,6% en diciembre próximo. Para septiembre, el estudio que dirige Marina Dal Poggetto dijo a Infobae que el índice se verá traccionado por las subas en cigarrillos, colegios bonaerenses, las nuevas tarifas de electricidad y gas, subtes, expensas y aumento para las empleadas de casas particulares.
Dal Poggeto cree que el actual esquema de mejora en los indicadores financieros no es sostenible, y que el Gobierno “está vaciando el Banco Central”, fenómeno que puede derivar en una devaluación desordenada.
Por el contrario, el Gobierno cree que se mantendrá la tendencia declinante de la brecha cambiaria a partir de la liquidación acelerada del agro (con el nuevo “dólar soja” y los créditos que pueda conseguir el ministro Sergio Massa en Washington por parte de los organismos multilaterales, que alimenten transitoriamente las reservas internacionales y alejen las expectativas de una mayor devaluación en el mercado cambiario oficial. Este fenómeno, si se confirma, debería mantener la inflación en la actual “velocidad crucero” y tal vez evitar que llegue a los temidos tres dígitos (FIEL pronosticó 112% para este año).
El contexto regional
En tanto, en Venezuela se registró una inflación del 17,3% el mes pasado -con una notable reducción respecto del mismo mes del 2021-, según el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), una medición independiente del gobierno de Nicolás Maduro por las distorsiones en la difusión de las estadísticas públicas. En julio, esta medición había llegado al 14,5%; en tanto, el último dato de inflación informado por el Banco Central de Venezuela fue 7,5% en julio.
La inflación de agosto en América latina Infografía de Marcelo Regalado
De este modo, la inflación llegó al 90% desde enero y al 153% en el último año, por lo que Venezuela sigue entre los países con más inflación del mundo, aunque ya logró dejar atrás su hiperinflación de cuatro años por la dolarización de facto de su economía.
Luego de la Argentina el mes pasado se ubicó Chile con 1,2%, 9,9% desde enero y 14,1% en el último año; un paso atrás quedó Colombia con el 1,02%, el 9,06% desde enero y el 10,8% en el último año. Un escalón atrás quedó Uruguay con 0,8% en agosto, 7,7% desde enero y 9,5% en los últimos 12 meses. Más atrás, México registró 0,7% en agosto y 8,7% en el último año; Perú registró 0,6% (6,3% desde enero y 8,8% en el último año), Paraguay 0,4% (7,2%% y 10,5%, respectivamente), Bolivia el 0,04% en agosto (1,5% y 1,6%); Ecuador tuvo 0,03% el mes pasado, 3% desde enero y 3,7% en 12 meses. La tabla la cerró Brasil con otro mes de deflación, del 0,3%, mientras que la inflación desde enero acumuló 4,3% y en los últimos 12 meses fue del 8,7 por ciento.
El ránking mundial lo lideran Líbano con 210%, Sudán 199%, Zimbabwe 192%, Venezuela 153%, Siria 139%, Turquía 80% y la Argentina cerca del 76%, aún sin haber acelerado demasiado la devaluación del tipo de cambio y con múltiples controles de capitales y de precios.
Entre los países más desarrollados, ya informaron sus índices de inflación Italia (8,4% el último año) y Francia (7,6%), mientras que en julio la inflación interanual fue del 10,1% en Gran Bretaña, 8,5% en Estados Unidos, 7,5% en Alemania y 2,4% en Japón.
Se espera que el Banco Central de la República Argentina vuelva a subir las tasas de interés de referencia la semana próxima luego de que el Indec difunda la inflación de agosto, por lo que quedarían arriba del 100% en términos efectivos. Zimbabwe encabeza la tabla regional con tasas del 200%, lo que hasta ahora no le ha permitido reducir su galopante suba de los precios.
Infobae
Foto: Reuters