“Fue un shock, no lo pensaba, yo creía que era estrés y no, me dijeron ‘tenés Parkinson’ de una manera medio cruda”, contó el periodista deportivo Emiliano Pinsón en una reciente entrevista en Perros de la Calle (Radio Urbana Play). Hace un año y medio recibió el diagnóstico y,visiblemente emocionado en la nota, decidió compartirlo públicamente para hablar sobre el gran cambio que atraviesa y cómo la enfermedad le dio una nueva perspectiva.
Como invitado para hablar sobre la actualidad deportiva de Boca y River, Pinsón tuvo un relajado paso por Perros de la Calle y, luego de analizar el mundo futbolístico, se refirió a su paso por la radio al lado de María O’Donnell. En ese momento, decidió dejar ese trabajo porque no se sentía bien físicamente y esas primeras dolencias fueron las que lo llevaron a consultar al médico.
El periodista tiene 50 años (Foto Instagram @emipinson)
Uno de los padecimientos que describió fue el insomnio, motivo por el cual le realizaron el llamado estudio del sueño. “Me dio mal, yo me seguía sintiendo bastante mal. Me fui de vacaciones con mis hijos y no estaba bien, me hice un estudio más porque me sentía raro físicamente. Fui al Fleni, hice unos ejercicios que me dieron y me diagnostican Parkinson en febrero del año pasado y ahí entendí todo porque no la estaba pasando bien de salud”, detalló el periodista.
A sus 50 años, la noticia le causó un gran impacto. “Fue un shock, no lo pensaba. Yo creía que era estrés y no, me dijeron ‘tenés Parkinson’, aparte de una manera media cruda”. Yo decía ‘bueno, voy a ser el de antes’ y el médico me dijo que no iba a ser el de antes, iba a estar cerca, pero no iba a ser el mismo de antes. La verdad es que en ese momento eso te golpea”.
En detalle, relató que tiene Parkinson rígido, el “que tiene el Indio Solari”. Sin hablar en términos médicos, describió que este padecimiento le provoca movimientos robóticos que en su caso son leves, pero podrían incrementarse con el paso del tiempo. De manera crónica estará medicado. En cuanto a cómo modificó su vida el diagnóstico, señaló que si bien dejó de jugar al fútbol, -como lo hacía desde hace años- hace actividad física, aunque algunos movimientos le son difíciles de realizar.
“En lo cotidiano es bastante complicado. Te jode para ir al baño, para comer, para abrir una puerta, se mete por todos lados. Era o quedarme llorando y perder el tiempo o salir a pelear y elegí esto último porque lo voy a tener todo el tiempo hasta que encuentren una cura porque no pienso retirarme”, manifestó al hablar de la enfermedad.
En cuanto a lo personal, destacó que luego del diagnóstico se sensibilizó en diversos aspectos de su vida. Comenzó a decirle a las personas cuánto los quiere y no guarda sus lágrimas cuando la emoción lo invade. También destacó que se siente muy acompañado por su familia y su círculo más íntimo. “Si me ven lagrimear es de contento, de ir para adelante”, aseguró para describir la actitud que tiene frente a esta nueva realidad que enfrenta día a día.
La Nación
Foto: Instagram @emipinson