Por las retenciones del 35% que se le aplican, obtienen un dólar de 3,88 pesos cuando en el mercado desregulado está a 9,79. Eso explica por qué retendrían liquidación de divisas. Desincentivo para volcarlos para recomponer reservas.
La brecha que existe entre lo que reciben los sojeros y el tipo de cambio en el mercado paralelo explicaría por qué retacean la liquidación de divisas, algo que impacta directamente en la caída de las reservas del BCRA. El dólar que obtienen al exportar es el tipo de cambio oficial menos la retención del 35%, lo que sería un $3,88 por cada billete verde que liquidan. Esto se compara con la cotización del dólar en el mercado libre, de $9,79; los sojeros obtendrían 150% más vendiendo sus divisas en el mercado autoregulado.
Según un informe de Estudio Bein, las estimaciones del mercado apuntan a una retención de la cosecha de soja que se ubica en alrededor de 9/10 millones de toneladas por encima de los stocks "normales" para esta época del año.
Considerando los precios actuales, dichos inventarios representan un monto potencial de ingreso de divisas en torno a u$s4.500 millones que no ingresaron en los últimos meses y contribuyeron a explicar la caída en el stock de reservas internacionales.
"Pero a priori, si no se corrige en parte la distorsión de precios relativos, y persisten tasas de interés negativas, difícilmente este stock tienda a bajar, más bien lo contrario", dice Estudio Bein.
Esto hace que haya más fuga de dólares en la economía (por pagos de deuda, déficit de energía y turismo) que ingresos por el canal comercial, principalmente el exportador de soja. "Mantener el statu quo actual resulta inviable, sobre todo cuando las perspectivas del sector exportador no muestran a priori un salto relevante para el próximo año", afirma el estudio.
Bein cree que podrían mostrar incluso alguna caída si se corrobora el escenario actual de precios futuros -con una soja a mayo de u$s450 la tonelada-, o los rindes resultan menores a los esperados y/o se corrobora un escenario de mayor retención de exportaciones, "algo que dependerá en gran medida de la consistencia entre la tasa de devaluación, la tasa de interés y en definitiva del nivel que tome la brecha cambiaria el próximo año".
Para la consultora que dirige Federico Muñoz, "la brecha cambiaria (oficial vs. paralelo) es un determinante crucial de la oferta neta de divisas". Cuanto mayor sea la brecha, mayor el incentivo
a sobrefacturar importaciones y subfacturar exportaciones; "menor el interés de los chacareros por vender su soja y -fundamentalmente- menor el incentivo a traer dólares financieros al país".
"La distancia entre los tipos de cambio de la soja y el blue explica por qué el cepo cambiariono sólo ha sido impotente para luchar contra la restricción externa, sino que la ha agravado (en 2013 se han perdido más reservas que en los dos años previos)", acota.