Qué significan los colores Azul. Nos recuerda al mar y al cielo y nos transmite estabilidad, confianza y seguridad. «Aunque este color significa todo eso, también puede transmitir frialdad o lejanía, por lo que si un día te sientes así, es muy normal que recurras al azul», dice Lara Ferreiro. Rojo. «Es uno de mis favoritos porque representa el calor, la llama o la fuerza, y está asociado a personas con mucha estimulación y valentía», dice la psicóloga. Se trata de un color muy poderoso que transmite garra, amor y seguridad, aunque también se asocia al peligro, tensión o sangre: «Aquellos que visten de rojo transmiten seguridad y fuerza, y grandes marcas lo usan». Verde. Va asociado a personas «ecofriendly». Si lo llevas puesto transmitirás armonía y paz, y querrás dar a entender que vives la vida con mucha esperanza. También está vinculado a personas amigas de los animales. «Es un color que no suele relajar ni tranquilizar, aunque es muy interesante», apunta Lara Ferreiro. Amarillo. «Simboliza la felicidad, y suelen llevarlo puesto personas felices, optimistas y con vitalidad. Tiene connotaciones muy positivas, aunque también significa que estas personas pueden engañar o mentir o que hay que tener cuidado con ellas», dice. Hay personas muy supersticiones que no usan el amarillo porque intuyen que trae mala suerte. Naranja. Se trata de la combinación del rojo y amarillo, por lo que tendrá connotaciones de ambos. «Lo suelen usar personas muy cálidas con un punto desafiante, a las que le van los retos. Son personas que necesitan muchos estímulos», cuenta. Además, también se relaciona con personas con tendencia a la adición, que pueden vestir de naranja porque es un color muy estimulante. Se usa como sustituto del rojo porque no satura tanto. Negro. «Aquellos que visten de negro suelen representar la elegancia y sofisticación, pero cuando se hace con estilo. Es un color que si se lleva siempre puesto puede dar la impresión de ser alguien triste, deprimido, frío y solitario. A veces puede generar desconfianza en quien siempre lo lleva y tiene un poder muy autoritario», explica Lara Ferreiro. Blanco. Quienes lo llevan tienden a ser personas puras, claras y representan la inocencia, la simplicidad o la limpieza, aunque también tienen su connotación negativa. Al parecer, personas con trastorno obsesivo-compulsivo podrían vestir con frecuencia de blanco porque es un color que se mancha muy fácilmente y siempre hay que recurrir a otra prenda. «Conocí a un paciente que tenía 40 camisas blancas y 40 camisetas blancas, y se las iba cambiando constantemente. También este color define a personas que se agobian fácilmente y que necesitan amplitud», dice la profesional. Violeta. Suelen recurrir a él personas sabias porque es un color muy arriesgado con poder y lujos. También está asociado a conceptos femeninos, igual que el rosa. Rosa. Dice Lara Ferreiro que el rosa es un color que transmite calma, pero psicológicamente también es muy poderoso para el sexo femenino: «Está asociado a personas aniñadas o inmaduras, y grandes marcas como Barbie saben a qué público impresionar con este color». Cabe destacar, según cuenta la profesional, que un mismo color puede tener muchos significados diferentes, dependiendo de valores como la educación o cultura, porque mientras que en Oriente el blanco significa la muerte, en Occidente es el negro el color del luto. |