Silvia Barrera, reconocida como Veterena de Malvinas y la instrumentadora quirúrgica más condecorada de la historia de las FF. AA, visitó Río Cuarto y previo a su charla habló con Micrófono Abierto acerca de su experiencia en la guerra de 1982.
Silvia Barrera tenía 23 años y madre de cuatro hijos cuando se alistó como voluntaria para ir como instrumentadora quirúrgica a las Islas Malvinas. Fueron tres diplomáticas, una de las Fuerza Aérea y otras cinco mujeres más que también fueron como quirúrgicas. Hoy es la mujer más condecorada de la historia de las FF. AA.
Por improvisaciones que ocurrían durante la guerra, Barrera terminó en la embarcada del rompehielos ARA Almirante Irízar, permaneció dentro de la zona de conflicto desde 8 al 18 de junio de 1982. Hoy se desempeña como responsable de Ceremonial del Hospital Militar Central.
Sobre su experiencia como quirúrgica dijo se sufrían bombardeos continuos desde el 9 al 14 de junio, hasta que se firmó el cese del fuego. “Trabajamos de día y de noche, somos las que más trabajamos con fuego continuo”, expresó.
Con respecto al trato que recibían, destacó: “hay que comprender a que esos hombres (militares) se resistían a tener mujeres en las Fuerzas Armadas. Uno te recibía de manera altanera, otro con diferencias y después fue cambiando cuando fuimos trabajando juntos".
Hoy, cuarenta años después, Barrera contó que se siente bien de haber ido a las Malvinas y que “eso nos hace quedar a nosotras, las enfermeras en un lugar destacado. Nosotras, con nuestro sentido patriótico, creo que es algo que no nos tenemos que arrepentir para nada”.
“Uno tenía una relación especial con los heridos, todas teníamos un paciente preferido”, contó.
Respecto a los momentos vividos en la guerra, Barrera lo que más destacó fue la llegada a las Islas Malvinas: “veía el terreno parecido al terreno de Río Gallegos. El día que empezaron a llegar los heridos, fue un momento fuerte y luego cuando firmaron el cese del fuego”.
Luego de volver de la guerra, no fueron reconocidas por años, pese a que en 1990 fueron distinguidas por el Congreso Nacional.
Luego vino el reconocimiento como veterana de Malvinas. “En nuestro caso, fuimos reconocidas oficialmente once mujeres. Seis de ellas, Susana Maza, Cecilia Ricchieri, Norma Navarro, María Marta Lemme, María Angélica Sendes y yo, pertenecientes al Ejército Argentino cumplimos funciones embarcadas en el buque ARA Almirante Irízar", relató.