Las tarifas de los servicios públicos tendrán aumentos superiores a los que se anunciaron tiempo atrás. Si bien los incrementos estarán por debajo de la inflación de 2021 (y de las estimaciones proyectadas para 2022), el esquema difundido hoy muestra que la mayoría de los usuarios tendrán ajustes superiores al 40% (la promesa oficial anunciaba ajustes del 20%).
Fue uno de los principales temas de discusión con el FMI, y el Gobierno finalmente cedió ante un planteo explícito del organismo, que apuntó contra el gasto en subsidios energéticos (en 2021 insumieron una cuenta de más de US$11.000 millones). Así, sepultó la intención de parte de la coalición oficialista de convalidar ajustes tarifarios inferiores al 20% para 2022 para la mayoría de los usuarios.
El Gobierno autorizó subas en las tarifas de gas, a partir de los pedidos del FMI.
El parámetro de ajuste será el Coeficiente de Variación Salarial (CVS), un indicador que elabora el Indec a partir del relevamiento de los incrementos salariales del sector privado registrado, el sector público y los trabajadores informales. En 2021, ese índice arrojó un 53,4%.
A su vez, el Gobierno decidió segmentar a los usuarios en tres grandes grupos, sobre los cuales se aplicarán ajustes diferenciales. Para el nivel de menores ingresos, que comprende a los beneficiarios de la tarifa social, el aumento máximo según planteó el Gobierno será del 40% del CVS del año anterior.
De esta forma, la suba tarifaria para este año será de un promedio del 21,3%. Se trata de un ajuste de más de 30 puntos inferior a la inflación esperada para el año (55% es lo que proyectan bancos y consultoras, según el último Relevamiento de Expectativas del Mercado del BCRA), y que está en línea con lo que se autorizó luego de las últimas audiencias públicas y se aplica desde este mes (entre 18% y 22% para usuarios de Edenor y Edesur; entre 14% y 17% para el gas).
Las tarifas eléctricas subirán menos que la inflación para la gran mayoría de los usuarios del país.
Para un segundo grupo de usuarios, el de ingresos medios, el aumento tarifario será mayor. Según confirmó el Gobierno, para este segmento el ajuste tendrá como tope el 80% del CVS del año anterior. De esta manera, la suba estipulada en 2022 será de 42,7% en promedio.
En este caso, habrá ajustes sucesivos a lo largo del año, aunque no se confirmaron fechas. Según indicaron fuentes oficiales, un primer ajuste será del orden del 20% en promedio –lo ya convalidado tras las audiencias públicas-, mientras que los posteriores incrementos se darán en los próximos meses y requerirán la realización de nuevas audiencias.
“El Poder Ejecutivo nacional impulsará, previa audiencia pública convocada a fines de abril de 2022, las medidas que tracen un sendero para el bienio 2022-2023 con una nueva propuesta tarifaria con un esquema de segmentación de subsidios”, sostienen en el Gobierno.
Por último, se encuentra el grupo de usuarios a los que el Gobierno decidió retirar la totalidad de los subsidios. Según estimaciones oficiales, se trata de los hogares de mayores ingresos, que comprenden alrededor del 10% de la población, aunque no se brindaron definiciones sobre cómo se realizará la segmentación y la identificación de este segmento.
Para los usuarios comprendidos en este sector, la decisión es que paguen tarifa plena. En el caso del gas, según las estimaciones de la Secretaría de Energía, el ajuste para usuarios residenciales será de entre el 92% y el 130%, según la época del año (en los meses de invierno los costos y la demanda son mayores). Para las tarifas eléctricas, la estimación es que las facturas podrían llegar con un aumento del 100%.
La Nación por Esteban Lafuente