Es el cuarto registro más alto. Los picos anteriores fueron el 14 de enero, con 139.853 casos; el 11, con 134.439; y el 12 con 131.082. Así, el total de infectados asciende a 7.576.335 y son 118.809 las víctimas fatales
El Ministerio de Salud de la Nación informó este jueves 19 de enero que, en las últimas 24 horas, se registraron 182 muertes y 129.709 contagios de coronavirus: el cuarto registro más alto de toda la pandemia. Los picos anteriores fueron el viernes 14 de enero, con 139.853 casos; el martes 11, con 134.439; y el miércoles 12 con 131.082.
Con 53.260 positivos, la provincia de Buenos Aires alcanza un total acumulado de 2.912.169 casos. Esos casi 3 millones de infectados indican que un 38% de los contagios que hubo en el país durante la pandemia fueron en territorio bonaerense.
Así, el total de infectados desde el inicio de la pandemia asciende a 7.576.335 y son 118.809 las víctimas fatales.
De ayer a hoy se realizaron 183.622 testeos. Como resultado, la tasa de positividad registrada es del 70,63%, es decir, siete de cada diez que se testean son positivos.
Por otro lado, del total de muertes reportadas hoy, 102 son hombres y 79 mujeres. Las provincias que más decesos informaron fueron Buenos Aires con 66, Córdoba con 32 y Salta y CABA con 20 fallecidos, respectivamente. Una persona de la provincia de Buenos Aires fue reportada sin datos de sexo.
Esta mañana, durante su habitual conferencia de prensa con los periodistas acreditados de Casa Rosada, la portavoz de Presidencia, Gabriela Cerruti, se refirió a la situación epidemiológica y sanitaria nacional, y explicó que, a pesar de la cantidad de casos, hay medidas que están teniendo buen efecto.
Por otro lado, sostuvo que en los eventos masivos es clave solicitar el pase sanitario para que la población que concurra tenga las dos dosis de la vacunación. “Hasta que se termine este momento de contagios casi masivos debemos completar los esquemas de vacunación y mantener los cuidados, que son usar los barbijos, mantener la distancia y tratar de que los encuentros sean al aire libre”, reiteró Cerruti.
Según la última actualización del Monitor Público de Vacunación, el total de inoculaciones aplicadas asciende a 83.781.920, de las cuales 39.171.403 corresponden a primera dosis, 34.275.752 a segunda, 2.976.465 adicionales y 7.358.300 de refuerzo, mientras que las vacunas distribuidas a las jurisdicciones llegan a 94.707.430 y las donadas a 5.083.000.
En medio del aumento de casos de coronavirus, y con el objetivo de descomprimir el sistema de guardias y los centros de testeos, las farmacias esperan comenzar a vender los autotest para COVID-19 la próxima semana. Así lo confirmó esta mañana la presidenta de la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), Isabel Reinoso, e indicó que los primeros autotest de COVID-19 podrían llegar a a estar disponibles en farmacias entre el 25 y el 30 de enero.
Según las declaraciones que la dirigente empresarial hizo en Radio Del Plata, el primer autotest que estaría a la venta tiene un costo 1.560 pesos. “El precio será el mismo en todas las farmacias que se adhieran; independientemente de la logística que haya que hacer para la entrega: Ushuaia, La Quiaca, Córdoba, La Rioja, Salta o Jujuy, todos van a tener el mismo precio que Buenos Aires”, sostuvo Reinoso.
Consultada acerca de si el autotest tendrá validez oficial en caso de requerir acreditar un negativo de coronavirus para un viaje, Reinoso dijo que aunque va a tener el registro en el Sistema Nacional de Vigilancia, el autotesteo no va a ser apto para viajar por ahora porque se está pidiendo PCR.
Por otro lado, explicó que el tiempo establecido en la resolución oficial sobre el plazo que debe pasar entre la compra del autotest y su utilización es de siete días. “Lo lógico es que se compre el test para una persona que tiene síntomas para poder confirmar si es COVID-19 positivo, pero puede pasar que venga una persona por ser contacto estrecho y ahí recomendamos que espere 5 días”, agregó.
En este momento, los autotest no están cubiertos por las obras sociales pero, según Reinoso, las farmacias no tendrían ningún problema si una obra social quiere incluirlos. “Esperemos que esto sea una herramienta para poder descomprimir la situación que se viven en los centros de testeos, con largas filas para acceder a los controles”, concluyó.