Sólo dos días pasaron para que la provincia de Entre Ríos se viera nuevamente conmocionada por un crimen brutal y casi calcado: un grupo de jóvenes que persiguió, atacó y mató con un cuchillo a un hombre en plena vía pública.

El primer hecho ocurrió durante los festejos de Año Nuevo en la localidad de Gualeguay. Allí, Jesús Fernández, un padre de familia de 36 años, fue asesinado a golpes y puñaladas por una patota de adolescentes. Poco más de 48 después, la nueva víctima fue Juan Salazar, un hombre de 29 que recibió un puntazo en el pecho luego de discutir con varios jóvenes en la ciudad de Federación. Además, recibió otra herida en la zona de la ingle.

Una alta fuente con acceso al expediente, a cargo de la fiscal María Josefina Penon Busaniche, confirmó a Infobae que por el episodio fueron detenidos dos sospechosos, un joven de 21 años y otro de 24. Los investigadores llegaron a ellos gracias a una serie de entrevistas y toma de testimonios a varios testigos del crimen y vecinos del barrio, quienes identificaron a los presuntos agresores en la escena. En principio, fueron cuatro los que participaron del ataque. “Hablar de patota no es preciso, pero sí fueron varios contra uno solo”, dijo.

El hecho tuvo lugar en la esquina de las calles José Santiago y Las Camelias, en el barrio 144 Viviendas, ubicado en el oeste de la ciudad entrerriana. De acuerdo con la investigación, ocurrió entre las 22 y las 23 cuando Salazar estaba por llegar a la casa que compartía con su pareja después de visitar a su madre. A una cuadra, un grupo de cuatro jóvenes comenzó a increpar al hombre de 29 años aparentemente por un conflicto de vieja data. Juan, de acuerdo con testigos, corrió unos 100 metros y trató de refugiarse en la casa de una vecina con la que había charlado minutos antes. Sin embargo, su esfuerzo no fue suficiente y los agresores después de perseguirlo lo alcanzaron y le asestaron una puñalada en pecho y en la zona de la ingle. Después, escaparon ante la vista de los vecinos.

La víctima cayó herida de gravedad y fue trasladada por los habitantes del barrio hasta el Hospital San José. Sin embargo, debido a la gravedad del puntazo fue derivado de forma inmediata al Hospital Delicia Concepción Masvernat, de la ciudad de Concordia. Allí, horas después y pese a los esfuerzos médicos, Salazar murió.

“Había mucha gente en el lugar. Es muy poco lo que se sabe hasta ahora pero por algunos datos que pudimos recabar, logramos identificar a dos personas”, reveló un investigador del caso. En ese sentido, señaló que se trata de jóvenes con un alto grado de violencia “que ante cualquier conflicto reaccionan de esa manera”.

La fiscalía por el momento tiene identificados a los a dos están detenidos, faltan los dos otros agresores. Por lo pronto, uno de ellos se negó a declarar. El otro, en cambio, sí declaró y reconoció que encontraron a la víctima cuando estaba por llegar a su casa y que lo persiguieron. Sin embargo, aseguró que él no le hizo nada.

La causa sumó otro elemento de valor que complica la situación de los dos detenidos. Se trata de la declaración de un menor de edad que se presentó espontáneamente ante la fiscal Penon Busaniche en compañía de un abogado y reveló haber sido parte del grupo de los cuatro que persiguieron a Salazar, aunque se desligó del ataque. Dijo que los autores del ataque fueron efectivamente los dos que hoy están presos. “Se le tomó una declaración informativa, que tiene un formato similar a la de imputado”, señalaron las fuentes.

Respecto a la víctima, en julio del año pasado cumplió una condena por el delito de robo agravado. Tenía trabajo y estaba rehaciendo su vida en compañía de su pareja. “En este momento tenía un pasar tranquilo pero se encontró con esto”, lamentaron los investigadores. Al parecer, uno de los cuatro agresores le guardaba rencores por un viejo conflicto en el que estaba involucrada su hermana. Al verlo, lo persiguieron y lo atacaron. En los allanamientos que se realizaron por parte de los efectivos de la Comisaría Nº3, incautaron armas blancas, entre las que había machetes y cuchillos. Estos elementos serán sometidos pericias. Luego de las indagatorias, el juez de Garantías aceptó la prisión preventiva por 20 días de los dos detenidos, quienes ahora están acusados del delito de homicidio simple.

Uno de los sospechosos, aseguran fuentes judiciales, tiene una condena cumplida por lesiones, amenazas calificadas y daños. El otro, a su vez, tiene causas en trámite pero sin condena. De acuerdo con información brindada por el jefe de la Departamental de Federación, Fabían Noya, en diálogo con radio La Voz de Nogoyá, el cuarto integrante de la banda también es menor de edad.

Infobae Por Miguel Prieto Toledo