El actor canadiense, quien protagoniza y produce la cinta de comedia de aventuras y acción que llega este jueves a los cines argentinos, afirmó que el filme propone desde el humor una reflexión sobre temas como el heroísmo o el sentido de comunidad.
El actor canadiense Ryan Reynolds, quien protagoniza y produce "Free Guy: tomando el control", la cinta de comedia de aventuras y acción que llega mañana a los cines argentinos, afirmó en diálogo exclusivo con Télam que pese a que el filme propone desde el humor una reflexión sobre temas como el heroísmo o el sentido de comunidad en línea él reivindica el objetivo de que "el público se vaya con una gran sonrisa".
"Cuando miro atrás, la razón por la que quise hacer ‘Free Guy’ es porque es un antídoto para las malas noticias que veíamos allá por 2019, y mientras marchábamos hacia tiempos aún más oscuros ese aspecto se volvió más relevante todavía", enfatizó el intérprete conocido mundialmente por encarnar al ácido superhéroe de Marvel "Deadpool".
En el filme de Twentieth Century Studios, Reynolds es Guy (que en inglés es un nombre propio y también se traduce como "un tipo"), un cajero de banco que descubre que en realidad es un personaje secundario de un videojuego de mundo abierto.
Creado para tener una interacción limitada con los avatares que eligen los jugadores para circular por ese mundo virtual, imprevistamente Guy se sale de su función prediseñada y decide transformarse en el héroe de su propia historia.
El elenco de la película, dirigida por Shawn Levy a partir de un guion de Matt Lieberman y Zak Penn, se completa con Jodie Comer (la genial villana de "Killing Eve"), Lil Rel Howery, Joe Keery, Utkarsh Ambudkar y el neocelandés Taika Waititi.
Participaron también con cameos algunas de las figuras más reconocidas del mundo de los videojuegos como Imane “Pokimane” Anys, Lannan “LazarBeam” Eacott, Seán William “Jacksepticeye” McLoughlin, Tyler “Ninja” Blevins y Daniel “DanTDM” Middleton.
Ryan Reynolds está en el negocio audiovisual desde los 14 años, hace ya tres décadas, y desde entonces destacó en una variedad de géneros que van desde el cine de acción con títulos como “Blade: Trinity”, romance como “La propuesta” y comedia como “Paper Man”. En el recorrido supo hacerse de un estilo propio que proyecta, haga lo que haga, la virtud de no tomarse demasiado en serio a sí mismo.
Ese rasgo de personalidad, que abunda menos de lo deseable en Hollywood, se traduce en el toque cómico al que se inclinan todos sus personajes y también en su mirada sobre “Free Guy” en conversación con esta agencia. Sin sobreactuar solemnidad como muchos de sus colegas, asume que antes que nada un filme como este tiene que ser “muy divertido”.
Télam: Guy es un tipo de héroe muy diferente a los varios que interpretaste en los últimos años en Deadpool, “Escuadrón 6” o en la saga de “Duro de cuidar”.¿Cómo fue meterte en sus zapatos?
Ryan Reynolds: Amé no solo hacer la película, sino verla crecer en posproducción y ver cómo Guy se iba volviendo más y más relevante. Me encantaba la idea de un protagonista que veía el mundo a través de la lente del optimismo, alguien que ha sido literal y figurativamente apuñalado, electrocutado, asaltado, secuestrado, pateado, atropellado, prendido fuego (risas) y aun así ve el mundo de una manera optimista como un lugar hermoso. Es algo increíble para un protagonista, para un héroe. Me encantaba el viaje que atraviesa en esta película de ser nadie a ser el héroe, que funciona de una manera diferente a la que yo haya visto antes en el cine.
T: Un mensaje de la película es que no está escrito de antemano quién puede y quién no ser un héroe.
RR: Sí, creo que está en el centro de las ideas que exploramos. Que la gente que está en el fondo puede salir de la sombra y convertirse en agente de cambio. Pero también, y más allá de los grandes temas cinematográficos con los que jugamos, creo que lo importante es que hicimos una película diseñada para que el público se vaya de la sala de cine con una gran sonrisa en la cara, habiéndose divertido.Me parece genial que se destaquen los temas de las película, pero amo sobre todo que sea una carta de amor al cine como yo lo veía cuando era chico, como "Volver al futuro", que construye mundos y te enamorás de los personajes.
T: Si cualquiera puede convertirse en uno, ¿quiénes son para vos los verdaderos héroes de nuestro mundo?
RR: Creo que las personas que muestran empatía, que es un rasgo de heroísmo para mí. Y a la luz del último año es básicamente imposible no ver que los trabajadores de la salud son héroes.
T: “Free Guy” transcurre dentro de uno de esos videojuegos de mundo abierto al estilo “Grand Theft Auto” (GTA), que congregan a millones de jugadores y funcionan como espacio para que las personas no solo se diviertan sino que a través de un avatar saquen afuera sus demonios, hagan catarsis. ¿Por qué creés que estos entornos virtuales son tan reconfortantes?
RR: Todo el mundo anhela ser parte de una comunidad. Y es algo que hasta ahora no había considerado en relación a los videojuegos y su cultura. Produciendo esta película veo que se trata de la accesibilidad, de la comunidad. Tantas personas antes de la pandemia estaban confinadas a sus casas por diferentes razones y esa era su conexión con el mundo de afuera. Con la pandemia y el aislamiento, se volvió mucho más evidente que ahí hay lazos de comunidad, apoyo y un sentimiento de pertenencia. Por esa razón tengo un gran respeto por la industria de los videojuegos. Yo, por otro lado, no juego porque tengo tres hijas, la más grande de seis años, y no me dejan hacer nada extracurricular… (risas).
T: Como relato los videojuegos se han vuelto más y más complejos. ¿Creés que ya están en el mismo nivel de riqueza narrativa que el cine o las series?
RR: Sí, por supuesto. Forma parte de lo mismo; son todos narrativa. Relato y juego de roles: de eso se trata el cine. Es cada vez más robusto y es tan importante para los “gamers” como el cine lo es para los cinéfilos.