La región había registrado precipitaciones abundantes durante este mes, pero algunas zonas aún necesitan agua y las próximas lluvias recién se podrían producir el próximo fin de semana.
La escasez de lluvias en el norte del núcleo agrícola sigue afectando al trigo y ya causó pérdidas relevantes en el área prevista originalmente para el maíz del ciclo 2013/14.
La región había registrado precipitaciones abundantes durante este mes, pero algunas zonas aún necesitan agua y las próximas lluvias recién se podrían producir el próximo fin de semana.
"No hubo lluvias durante el fin de semana" en el norte de la región agrícola central, señaló José Luis Aiello, director de la Consultora de Climatología Aplicada (CCA). En esa zona, "el trigo ya se deterioró hace tiempo y sus rendimientos van a ser bajos. Pueden registrarse algunas lluvias el próximo fin de semana, pero no serían montos importantes", agregó.
El especialista sostuvo que, debido a las demoras en la implantación provocadas por la falta de agua, "ya pasó la ventana de siembra del maíz de primera, la merma en área es importante y toda esa superficie va a pasar a soja".
La oleaginosa, cuya implantación comenzó recientemente, tiene la característica de ser más resistente que el maíz a condiciones climáticas adversas. A su vez, ofrece una mejor rentabilidad.
Mientras tanto, en el sur de la provincia de Buenos Aires, donde se concentra cerca de la mitad del trigo, el estado de los lotes del cereal es por lo general muy bueno y sólo la posibilidad de algunas heladas tardías podría afectar los rendimientos de la región, de acuerdo con el director de la CCA.