Retienen granos en una cantidad cercana a los 16 milllones de toneladas valuados en más de u$s7.400 millones.
La especulación por el futuro de la economía aún continúa entre los productores de soja, que todavía están a la espera de algún cambio en el mercado para empezar a vender algo de las 16 millones de toneladas de soja de la campaña vieja, valuadas en más de 7.400 millones de dólares.
La mayoría de los productores consultados coinciden en que seguirán “aguantando” frente al actual escenario, debido a que “no hay mucho por hacer” y porque tras las elecciones del domingo “no cambió nada”.
El hombre de campo mantiene su idea de apostar por las microdevaluaciones del peso para vender sus granos “lo justo y necesario”.
Mientras no haya “incentivos a la inversión” no entregarán los porotos. Con lo cual esperarán una semana o diez días para decidir los pasos a tomar. Pero una cosa es cierta, se acerca la siembra y hay que hacer gastos para encararla. Operadores del mercado señalaron que el productor sabe que el tipo de cambio de acá a diciembre se devaluará 3 centavos por mes, lo que lo hace “interesante a la hora de hacer las cuentas”.
Pero esto no se ve en la liquidación de divisas que difunden semanalmente los exportadores, según publico Infobae.
La semana pasada ingresaron u$s332 millones, 4,3% menos que los u$s347 millones anteriores.
En la comparación octubre- septiembre se ve una merma de 17 por ciento. Pese a todo esto, lo que más desvela al productor es la falta de lluvias; sin este factor climático no se puede iniciar la siembra tanto en soja como en maíz.
A esto hay que sumar la caída de precios a nivel internacional.
Ayer la oleaginosa perdió más de u$s10 en la Bolsa de Chicago, mientras el maíz alcanzó su nivel más bajo de los últimos tres años.
Los contratos de soja con vencimiento en noviembre se ubicaron en u$s467 por tonelada. El maíz, por su parte, perdió 2,1% a causa de una mejora en las perspectivas de la cosecha por la influencia del clima seco en EE.UU.
Según informó el Departamento de Agricultura de EE.UU., la cosecha de la oleaginosa muestra un avance de 77% en las regiones productoras de ese país, lo que garantiza disponibilidad de soja en el mercado mundial y presiona su precio a la baja. Esto supone que el 8 de noviembre se notará una importante mejora de la cosecha, lo que hará que sigan deprimiéndose los precios.