El nivel de vacunación creció a nivel nacional un 46% tras la presión de la Casa Rosada a los gobernadores ante la amenaza de la variante Delta. Misiones, Córdoba, Mendoza y Formosa son las provincias que en la última semana bajaron el ritmo de aplicación.
Empujada por un aluvión de vacunas, Argentina aceleró una marcha en el ritmo de vacunación durante la semana pasada: se aplicaron, en promedio, cerca de 350.000 dosis por día, según datos del Ministerio de Salud de la Nación. Es un 46% más que la semana anterior, pero son números que están lejos del ritmo de vacunación necesario para inmunizar a la mayor cantidad de personas ante la aparición de la nueva variante Delta del Covid-19.
A las cinco millones de dosis que salieron la semana pasada desde el Ministerio de Salud hacia todo el país se le sumó la presión constante de la Casa Rosada para que las provincias solucionen sus temas logísticos. ¿El resultado? Después de haber caído en un valle del ritmo de vacunación, las inoculaciones masivas se aceleraron y desde el Gobierno esperan volver a mejorar los números durante esta semana.
La vacunación promedio diaria durante la semana anterior había quedado cerca de las 237.726 dosis, mientras que la semana que acaba de concluir hubo días en los que se registraron picos de aplicación, elevándose ese promedio a 347.209. El viernes, incluso, se marcó el récord de vacunación desde el inicio de la pandemia: 471.399 aplicaciones en un solo día. Pero ese valor no se mantiene todos los días, y en especial los fines de semana, cae a casi la mitad. Ante la consulta de Infobae, desde el Gobierno estimaron que esta semana ese número se podría llegar hasta un promedio de aplicaciones diarias de 380.000, pero no más.
Con ese número -insistieron en el Gobierno- el sistema de vacunación ya estaría “bajo presión” y no creen que las aplicaciones se puedan continuar en aumento de manera sostenida.
Justamente a principios de junio, ante la llegada de millones de vacunas, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, pidieron explicaciones sobre el ritmo de vacunación en una reunión virtual con los 23 gobernadores y ajustaron las tuercas del sistema para subir el tope de aplicaciones en todo el país.
Sin embargo, el número ideal que espera el gobierno está lejos de otros países que vacunan en estos momentos a grupos poblacionales similares. España, por ejemplo, con un tamaño poblacional similar al de Argentina, también marcó su propio récord de vacunación esta semana, con 723.000 aplicaciones en un solo día, lo que representa un 2% de su población. En cambio, el récord argentino registrado el viernes pasado apenas llegó al 1%.
Las comparaciones son más favorables con países latinoamericanos como Brasil, cuya vacunación promedio diario en la última semana fue de 1,4 millones, lo que equivale al 0,7% de su población. Exactamente el mismo porcentaje que registró Argentina la semana pasada.
“¿Por qué hace falta un ritmo de vacunación más acelerado?”, se preguntó el médico neurólogo Conrado Estol. “Hemos visto que los países cuando llegan al 50% de su población con el esquema completo de vacunación, la circulación viral, las hospitalizaciones, la ocupación de las terapias intensivas y las muertes caen drásticamente. Lo vimos en Israel, Reino Unido y Estados Unidos”, explicó.
“Argentina debe vacunar todo lo que pueda. El promedio de vacunación debería aumentar hasta las 500.000 aplicaciones diarias porque de esta manera, en un par de meses, se podría alcanzar esa proporción de la población vacunada que frenaría la diseminación del virus y poco tiempo después haría caer significativamente las muertes tan elevadas que ocurren hoy en Argentina”, agregó el especialista.
Los ojos se enfocaron en la vacunación porque los casos de Covid-19 manifestaron un rebrote desde el 21 de junio pasado. No se puede dejar de considerar que a mediados de junio los nuevos contagios habían descendido un 12% a nivel nacional, tal como publicó Infobae y que para el último día del mes de junio, en esa última semana habían aumentado un 17%.
El Ministerio de Salud ya detectó, además, cinco casos de la variante Delta en viajeros que regresaron al país, que se destaca por ser aún más contagiosa. Ante la posibilidad de una rápida dispersión de esta variante, la vacunación volverá a ser clave para evitar más muertes, aunque los anticuerpos generados por las inoculaciones suelen aparecer cerca de la tercera semana después de la aplicación.
Las provincias que bajaron el ritmo
La aceleración de la vacunación, sin embargo, tuvo algunas excepciones. Misiones, Córdoba, Mendoza y Formosa son las provincias que en la última semana bajaron el ritmo de aplicación en comparación con los siete días previos, según los datos oficiales del Ministerio de Salud de la Nación. La gran cantidad de vacunas repartidas en los últimos días dejó a casi todas las provincias con stock suficiente para continuar con la vacunación.
Para el análisis del ritmo de aplicación se calculó el promedio diario de aplicación de los últimos siete días y se lo comparó con el de la semana previa.
Misiones es la provincia que más desaceleró su vacunación: con los datos de la semana que acaba de concluir, se aplicaron un 26% menos de vacunas que la semana anterior, según información oficial. La provincia es la jurisdicción que mayor cantidad de dosis acumula en stock. Son 16.827 vacunas sin aplicar por cada 100.000 habitantes.
Ante la consulta de Infobae, desde el gobierno de Misiones explicaron que la gran cantidad de población joven que tiene la provincia (la mitad de los habitantes es menor de 22 años) es una de las dificultades que enfrentan, ya que -sostienen- es más complicado que acudan a los centros de vacunación. “Los grupos de riesgo están todos vacunados con dos dosis”, remarcaron desde Misiones. Y agregaron que, además de la vacunación con turno, salieron en búsqueda de los jóvenes en lugares públicos, como las plazas y las ferias.
Córdoba - con una baja del 12% - y Mendoza - con un descenso del 10%- son otras dos provincias que mostraron descensos en el ritmo de vacunación en la última semana. Desde el gobierno de Córdoba aseguran que están por encima del 90% de las vacunas aplicadas, que esta semana superarán las 2 millones de dosis y que, a partir de mañana, comenzarán a dar turnos para aplicar las 100.800 nuevas dosis que envió el Ministerio de Salud. Esta provincia suma un stock de 162.617 vacunas pendientes de aplicación. En Formosa, la baja en el ritmo de aplicación fue menor: del 2%
En el otro extremo, las tres provincias que más aceleraron el ritmo de vacunación en la última semana fueron La Rioja (172%), La Pampa (163%) y Corrientes (116%).
En cuanto a la población vacunada con al menos una dosis, la Ciudad de Buenos Aires encabeza el ranking con el 50%. En el distrito porteño el ritmo de vacunación se duplicó en la última semana, con relación a la anterior. Detrás aparecen La Pampa con el 46% y San Luis con el 43%, según la información oficial.
Las provincias con más stock
Hay 3 provincias que tienen el mayor stock bruto de vacunas entregadas, pendientes de aplicación. La provincia de Buenos Aires (1.334.161 dosis), Misiones (224.471) y Santa Fe (163.836).
Sin embargo, estos valores no guardan relación con el tamaño poblacional. Al analizar dosis en stock por cada 100.000 habitantes, Misiones, ya señalada, es la que tiene mayor stock (17.606 dosis por cada 100.000 habitantes) y la que más bajó el ritmo de aplicación en los últimos siete días.
Le siguen Corrientes, con 9.998 dosis de stock sobre la misma base poblacional; Chaco con 9.876; Santiago del Estero con 9.479; y Santa Cruz con 9.134.
Al día de hoy hay 5.232.984 dosis en stock en el país, entre las que se distribuyeron a las provincias y están pendientes de aplicación (3.056.347) y las 2.176.637 que están en poder de Nación a la espera de ser distribuidas, incluidas las 768.000 de SinoPharm que llegaron ayer.