María Fernanda Callejón recordó sus épocas de femme fatale mientras disfruta de su presente como actriz.
Los desafíos comenzaron desde chica para María Fernanda Callejón, quien ya soñaba con ser una gran actriz, aunque para ese entonces, hacía escuela en los teatros de revista.
Hoy se conmueve al personificar a la gran poetiza Alejandra Pizarnik en el teatro, pero no reniega de su pasado.
"Para mí nunca existieron los géneros menores y ser vedette fue mi primer papel. Fue una gran puerta, aprendí el oficio y me di el gusto de trabajar con los grandes", dijo a Noticias, aunque También reconoció el hecho de haberse retirado a tiempo: "Lo hice allá arriba".
Durante ese período que duró 15 años en las tablas, Callejón posó seis veces para la revistaPlayboy como toda un femme fatale.
"Esas tapas me ayudaron a comprarme mi primera casa. Ahora me dan ternura, las conservo en mi casa como una reliquia Todo el mundo, hasta el día de hoy, me habla de esas tapas. No puedo creer lo que pasa, se van pasando de generación en generación. La última la hice a los 42 y les prometí a las mujeres de mi edad que no me iba a poner más en bolas".
Para lo que no hay edad, remarcó, es para "hacer cochinadas" en la intimidad: "Mientras uno se lo permita, ¿quién dice que tal o cual cosa no se puede hacer?", cuestionó.
Con muchas de ganas de ser madre, junto a su pareja Ricky Diotto, confesó que realiza tratamientos y que no descarta la adopción.