Nueve días después de haber sido internada en el Sanatorio Cantegril de Punta del Este por una complicación en su cuadro de coronavirus, Susana Giménez sigue evolucionando favorablemente. La diva fue llevada a la terapia intermedia de ese instituto médico el lunes pasado, ya que los doctores querían estabilizarle el oxigeno. Según lo que se había informado, tenía un cuadro leve de neumonía y mucha tos, por lo que requería de la asistencia de una mascarilla dentro del cuadro esperable de la enfermedad. Y, desde entonces, todos los partes han sido alentadores.
“Susana continúa evolucionando favorablemente, cada día mejor con menor apoyo respiratorio. De muy buen ánimo, sin complicaciones y con todos los parámetros en mejoría”, comunicó en el día de hoy Dolores Mayol, asistente personal de la Giménez, quien a diario se encarga de difundir la información que le acercan los médicos que atienden a la diva.
Susana comenzó con los primeros síntomas compatibles con el COVID-19 el sábado 5 de junio, un día después de haberse aplicado la segunda dosis de la vacuna Pfizer en el Campus de Maldonado (había recibido la primera el 24 de mayo y la última el 4 de junio). Alertada por haber sido contacto estrecho de uno de los empleados de La Mary que tenía la enfermedad, decidió hisoparse. Y tanto su test como el de su hija, Mercedes Sarrabayrouse, arrojaron resultados positivos.
“Tengo un dolor de cuerpo horrible. No puedo hablar”, le dijo a los pocos días a través de un mensaje de WhatsApp a Luis Novaresio, luego de que se filtrara la noticia de que había contraído el virus. El jueves por la noche, en tanto, sus síntomas se hicieron más fuertes y los médicos decidieron internarla para un mayor control. Pero lo cierto es que, cuando su familia estaba esperando que le dieran el alta para poder continuar con el tratamiento de manera ambulatoria, la diva fue trasladada a la terapia intermedia. Y, según explicó su hija Mecha el último miércoles, “tiene para varios días más” de hospitalización.
“El cambio es parte del tratamiento para estabilizar el oxígeno. Hasta ahora, todo lo que se está haciendo se ubica dentro del cuadro esperable de la enfermedad”, había explicado Mayol sobre la decisión de llevar a Susana de una sala común a una intermedia. A las pocas horas, sin embargo, la diva ya demostró una mejoría. Y, frente a la demanda de información de los medios, su asistente explicó: “Está con muy buenos parámetros, oxigenando un 99%. Aunque le cuesta un poco descansar bien porque le molesta la mascarilla”.
Por estos días, su amigo Ricardo Montaner usó sus redes para saludarla y desearle una pronta mejoría: “Querida Susana, estamos en fuerte oración por ti, toda la familia pensándote y queriéndote como siempre. Te amamos, Dios está en control. Fe y más fe”, escribió el cantante. Y de inmediato obtuvo miles de “Me gusta” de seguidores que esperan la pronta recuperación de la diva.
Cabe recordar que el hermano de la diva, Patricio, no se contagió la enfermedad ya que en los últimos días no había estado visitando el domicilio de la conductora. “Susana está bien. Es normal que entre el día seis y el ocho sean los días donde la tos molesta más. Están haciendo los estudios que le tienen que hacer. Está súper cuidada, así que quédense tranquilos. Entiendo que la gente quiere saber cómo está. Le agradezco al periodismo la preocupación, pero pido por favor que no me llamen o me manden tantos mensajes. (Al teléfono) lo tengo que dejar abierto para los médicos, para mi familia”, había dicho el cantante a través de las redes sociales luego de la internación.