Destinada a la alimentación animal en pastoreo directo, silaje, grano o heno, la avena es el cereal forrajero de invierno más importante del país, sostienen los especialistas del INTA. En la zona de Río Cuarto el cultivo tuvo un notable crecimiento en la siembra, con beneficios de una muy buena calidad en forrajeras, comenta la Ingeniera Natalia Aiassa. ” Es la principal especie utilizada como verdeo y forrajera de invierno”.

La profesional sostiene que es una pastura con mucha calidad, tanto en zonas donde se puede adaptar el cultivo, como también en los momentos de uso, ya que se puede usar en macollaje, comiendo la hoja, pero se puede utilizar cuando esta encañada, granada, ensilar, por lo que es un cultivo de características versátiles. ” Es un cultivo bastante rústico y en nuestra zona tiene mucha incidencia”. 
Algunos cultivos tienen mayor adaptabilidad o resistencia a los años de sequía, pero en comparación a los verdeos de invierno la avena es de los que se encuadran como rústico. ” Comparado con otros verdeos  que directamente no se usan en esta zona, ejemplo el ray grass anual, que es un verdeo invernal y  en otras zonas como provincia de Buenos Aires se usa mucho como pastura, pero en nuestra zona no tiene nicho”, asegura Aiassa.



Entre los cultivos de invierno de la zona de Río Cuarto, que no registra cantidades significativas de lluvias en invierno, la Ingeniera destaca la utilización de  avena, centeno, cebada  y en años como este, con más lluvias,  tienen más  producción. ” Cuando tenes una campaña que sembrás y llueve es lo mismo que la agricultura”.

Al ser consultada si la avena es un cultivo de cobertura o si se siembra en paralelo, de acuerdo al desarrollo de la ganadería de la zona, afirma que va de la mano con la ganadería. ” Se utiliza algo para cultivo de cobertura pero para mi no es la mejor opción“. Técnicamente, sostiene, que es más provechoso sembrar un centeno que una avena para combatir malezas. Además de lo mencionado Aiassa recuerda que la avena, para verdeo, se siembra temprano, es decir en los meses de febrero o marzo. ” Tiene un pico de producción antes de los fríos de pleno invierno, luego en pleno invierno el ritmo  de crecimiento se frena”. Por lo que concluye diciendo que el centeno tiene una tasa de crecimiento que no tiene la avena en el frío extremo invernal.
Los cultivos de cobertura tienen una siembra ” tardía”, es decir cuando se levantan los cultivos como soja, maní, etc. Una tendencia que se está dando en varias zonas del país y esta no escapa a ello, es la siembra al voleo vía aérea en cultivos sin trillar. De hecho, la Asociación de Ingenieros Agrónomos del Sur de Córdoba realizó una prueba al voleo pero con maquinarias Stara, probando  una  siembra en maíz verde.
” Generalmente se siembra a fines de abril o mayo y la avena hace poca cobertura verde y en invierno tiene varios factores como pulgones que la frenan mucho en su crecimiento”, asevera. Añade que para uso forrajero no tiene incidencia, ya que en primavera vuelve a reflotar y encañada, granada se come igual. “ Todo lo contrario a lo que pasa con el centeno”. 
En definitiva, si es para siembras tardes y para forraje la especialista en pasturas recomienda Avena. ” Ahora si es para cobertura hay que ir si o sí a centeno, trigo, criticale, opciones que tengan buena tasa de crecimiento y que el frío no los frene”.
Los manejos integrales de los establecimientos agropecuarios son los nuevos desafíos que plantea la producción agropecuaria de estos tiempos. Por lo que sumar herramientas biológicas para el remplazo, en parte, del control químico es una BPA que que se intensifica día a día y por lo que la Ingeniera coincide. ” En los últimos años, décadas se han hecho uso de muy pocos principios activos , entonces las malezas han desarrollado tolerancia, resistencia, por lo que todo lo que ayude de manera ecológica a la producción,  bienvenido sea”. 

Valor Agregado - Germán Tinari

Avena y ganadería van de la mano