“Estoy muy contenta, son todas experiencias nuevas y lindas. Viajé con nuevos compañeros, y a lugares que no conocía. Hasta el momento me han tocado partidos muy lindos y de mucha velocidad, que es algo que caracteriza a la categoría. Me siento muy cómoda” expresó Bevilacqua.
Y agregó: “Hay que tener mucho control en cuanto a las restricciones. A Gastón (Monzón Brizuela, árbitro del encuentro) lo conocía pero nunca habíamos dirigido juntos, fue un placer estar con él y el equipo. Trabajamos y planificamos mucho el encuentro previamente, y salió todo bien”.
Con respecto a sus sensaciones sobre las oportunidades que se le presentan, la arbitra comentó: “Son sueños hechos realidad. Implica una gran responsabilidad este contrato con AFA, y más obligaciones”.
Y finalizó, haciendo referencia a sus metas: “Esto de la pandemia dificulta establecer objetivos, pero por ahora es asentarme y estar de asistente. Mi idea es llegar a ser árbitro, aunque en categorías superiores no está tanto esa posibilidad para las mujeres. Ojalá podamos abrir ese camino”.