En medio de lágrimas, la actriz pidió disculpas por sus errores de la gala del martes: “Me gustaría volver a ganarme la confianza de todos”, agregó. En el final de la gala, la participante fue sancionada.
Pocas veces el comienzo de una gala de Mastechef Celebrity despertó tanto interés en la audiencia. Más allá del éxito del programa, los inicios suelen ser bastante rutinarios, con el conductor Santiago del Moro presentando al jurado, a los participantes y la dinámica de la preparación. Sin embargo, Claudia Fontán levantó la mano, pidió la palabra y cortó con la rutina. “Después de un martes para el olvido, vengo a poner la cara”, anunció la participante.
¿Qué era lo que quería olvidar la actriz? Se refería a su cuestionado papel durante la competencia de ayer, en la que no solo cometió el error de recoger una preparación del piso para volverla a usar en su plato, sino que lo negó en varias oportunidades. Primero, ante Damián Betular, cuando el pastelero la agarró (casi) con las manos en la masa. Luego ante sus colegas Germán Martitegui y Donato De Santis, quienes también le dieron la posibilidad de confesar el delito que había cometido, una de las herejías más grandes a la hora de hablar de gastronomía.
La participante iba a tener que esperar para hacer su descargo. “Tranquila, Claudia, tomá aire por favor, queremos que hable nuestro jurado”, señaló Del Moro y le dio la palabra a Betular. “Gunda, ayer no probé tu torta, vi cómo el toffee se había caído al piso. Vimos el programa de ayer y está confirmado que ese toffee está en tu tarta. Estas cosas no son aceptables en esta competencia, porque un cocinero nunca puede utilizar algo que estaba en el piso en algo que después le vaya a dar a un comensal para comer”, señaló Damián Betular.
“Es inadmisible que haya usado algo del piso, no lo podía creer cuando lo vi”, reconoció la actriz con lágrimas en los ojos.
“Lo que más me mortifica es haber tenido la posibilidad de reconocerlo y no sé por qué dije que no lo había puesto”; agregó, mientras en la pantalla mostraban sus reiteradas negaciones ante el jurado. “Eso es lo que me genera mucha angustia y mucha vergüenza”, reconoció la actriz cada vez más conmovida.
“Disculpen que me ponga así, me late fuerte el corazón. No sé como hablar de esto porque me avergüenza mucho. Me gustaría volver a ganarme la confianza de ustedes, que para mí es muy importante”, continuó la Gunda. Luego de pedir perdón al jurado, al conductor, a sus compañeros y al público, hizo un pedido a modo de súplica: “Les pido si sirve de algo ir directamente a la gala de eliminación y me permita poder seguir cocinando en estas cocinas que respeto mucho. Quedo a disposición para lo que ustedes decidan con respecto a mí”, cerró.
“Claudia, esta sociedad está construida para que fomentes las negaciones en todo nivel, pero este jurado va a tomar cartas en el asunto”, comentó Donato de Santis. Por su parte, Germán Martitegui dijo que no tenía nada que agregar a sus palabras de la víspera.
“En una cocina hay una estructura que se basa en la confianza. Yo como jefe de cocina tengo que tener confianza ciega en la gente que está abajo mío de que si le pasa algo como lo que te pasó a vos, no lo van a poner en el plato”, había manifestado el exigente chef, que sin embargo ponderó que haya puesto la cara: “Agradezco lo que dijiste, me parece que es un paso”, evaluó el exigente chef. “Así como lo de ayer estuvo muy mal, el reconocerlo hoy y pedir disculpas públicamente está muy bien”, concluyó Del Moro y cerró el tema.
La conductora de No está todo dicho, (La 100) tuvo que esperar para saber qué sanción le correspondía. Mientras tanto, se enfocó en la comida y retomó su buen andar en un certamen que la tiene como una de las participantes más parejas.
El desafío consistió en elaborar dos platos inspirados en la cocina belga. El primer ganador fue Gastón Dalmau, que se hizo acreedor de una medalla además del pasaje directo al balcón.
Claudia tuvo revancha en el plato principal, donde quedó emparejada con María O’Donnell para definir a la ganadora de la segunda estrella. “El mejor plato de la noche es el de Gunda”, anunció Betular. Claro que faltaba el postergado veredicto por su conducta del martes. “No vas a tener estrella hasta que dure esta semana, ni nunca. Vas a tener que cocinar todos los domingos hasta que llegues. Ojalá que sea lejos y que quede todo esto atrás”, continuó el chef y le otorgó la medalla a María. Por su parte, la actriz aceptó el veredicto sin inconvenientes. “Quedé a disposición de lo que decida el jurado y estoy completamente de acuerdo”, cerró.